Ni extraña, ni trivial, el dúo de electro dream pop navega entre lo denso y digerible. Aquí repasamos su primer trabajo de larga duración, tras el lanzamiento de su primer EP en el 2014.
Laikamorí
Persona
Plastilina Records
Perú
Calificación: 9/10
Escribe: Oscar Bermeo Ocaña
La propuesta de Laikamorí no es densa ni digerible. Navega entre esos dos polos, logrando una fisionomía propia. Ni tan extraña, asustadiza (como parecieran sugerirnos los enigmáticos trajes del binomio en sus presentaciones), ni tan ligera o trivial.
A veces más experimental, otras más pop. El sonido de Laikamori se mueve bien en los entremedios. Es en los espacios difusos, donde afloran las indeterminaciones, donde se construyen las expresiones más interesantes. “Sísifo” asoma como un lúcido diálogo entre guitarra y sintetizador, mientras que “Saudade” nos tapa con un manto electro/dream pop.
Las voces intervenidas, distorsionadas, que suenan a susurros oníricos, profundizan la atmósfera irreal a la cual nos someten los 43 minutos de los 11 tracks. Con algunos toques más concretos (ambient) y muchos pasajes grises, “Psi Gamma”, constituye uno de los momentos mejor logrados del álbum.
Ese halo surrealista que evidencia la propuesta no supone una licencia para el desorden rítmico. En Laikamorí hay construcciones armónicas, sólidas. Basta con escuchar “1957” para notarlo. Una perfecta sinfonía de pop etéreo.
Esta placa, “Persona”, confirma lo anunciado en el EP debut “°°°°°°°°°” (2014). Lo inasible, lo vaporoso, lo que parece flotar en el aire, a veces también puede ser atrapado en canciones.
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