Es importante que revises periódicamente las llantas de tu vehículo para evitar algún contratiempo durante tus viajes.
Una de las partes más importantes de adquirir un auto es aprender a cuidarlo. Saber qué hacer y qué no hacer con cada parte de tu vehículo te permitirá mantenerlo en buen estado y así ahorrar en reparaciones, ya que más que el mantenimiento, muchas veces los autos van al taller por la irresponsabilidad de sus dueños.
Aquí algunos consejos para garantizar el buen desempeño de tus neumáticos:
-Trata de que todas las válvulas tengan su tapón: Así mantendrás la presión adecuada.
-No te subas a la vereda ni estaciones muy cerca de ella. El contacto con el concreto daña la cara de las llantas.
-Revisa la presión de las llantas al menos cada quince días. Deben tener la presión correcta, ni alta ni baja.
-Cada seis meses (o diez mil kilómetros), realiza la alineación de tus llantas.
-No uses químicos abrasivos ni muy ácidos para limpiarlas, ya que ocasionarás que se resequen.
-Cada vez que salgas a manejar, revísalas, a fin de verificar si no les causaste algún daño la última vez que usaste el auto.
Tener un rodamiento del auto eficiente, cómodo, pero sobre todo seguro, no es cosa del otro mundo, como ya has visto cerciorarte de que tus neumáticos estén bien es una labor bastante sencilla.
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