Gracias a la iniciativa de los sacerdotes y la solidaridad de los ciudadanos, se podrá implementar una planta de producción de oxígeno para reforzar el cuidado a los enfermos de coronavirus.
Loreto es una de las regiones más golpeadas por la crisis sanitaria del coronavirus y, de acuerdo con el Ministerio de Salud (MINSA), hasta la fecha existen más de mil pacientes infectados. Asimismo, la capacidad de los centros de salud se encuentra colapsada y enfrentan el desabastecimiento de oxígeno; por lo que muchos familiares de pacientes con COVID-19 se han visto obligados a pagar precios excesivos para adquirir balones por redes sociales.
Frente a esta lamentable situación, sacerdotes de la iglesia de Iquitos pusieron en marcha una cruzada para instalar una planta de oxígeno que pueda ayudar a los ciudadanos contagiados. “Tenemos que hacerlo para salvar vidas. Se han publicado cuentas que están a mi nombre y a la del obispo. Los invito. Ayúdennos a hacer realidad esta plata de oxígeno”, anunció el padre Raymundo Portelli a través de las redes sociales y junto con el obispo Miguel Fuertes, del Vicariato de Iquitos, se convirtieron en los voceros de la campaña.
El llamado a la población se realizó durante la noche del domingo 3 de mayo y tan solo en cuestión de horas, lograron duplicar el monto solicitado. Para adquirir la maquinaria necesaria para el llenado de los balones necesitaban aproximadamente 400 000 soles, pero gracias a la solidaridad de personas naturales y jurídicas, han recaudado 1’004,030 soles.
La disponibilidad de tanques de oxígeno en los centros de salud es necesaria para los pacientes con insuficiencia respiratoria causada por el coronavirus. Su escasez ya ha cobrado la vida de muchos ciudadanos de la región amazónica. Sin embargo, el panorama parece mejorar, ya que, al reunir más dinero del previsto, se podría instalar otra planta adicional con el objetivo de producir diariamente unos sesenta tanques de oxígeno.
Con los fondos reunidos gracias a la gran labor del sacerdote, se podrá implementar esta planta local de producción de oxígeno en el menor tiempo posible, y así reforzar la atención a los enfermos de coronavirus. Por otro lado, la unión de los ciudadanos de Iquitos no se ha hecho esperar y, voluntariamente, han mostrado su disponibilidad laboral para poder realizar la instalación de la planta una vez que este llegue a la ciudad, así como para apoyar en el funcionamiento de la misma.
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