Renzo Zaferson dirige EXTINSAFE SAC, una compañía especializada en equipamiento contra incendios. Como tantas empresas en el Perú, la liquidez es una de sus principales preocupaciones del día a día. “Teníamos nuestras líneas de crédito a tope, por lo que los bancos ya no nos darían más financiamiento. Nos quedábamos sin dinero para seguir invirtiendo”, recuerda este empresario.
Todo cambió cuando descubrió la factura negociable. Había escuchado de la existencia de este mecanismo en algunos talleres del Ministerio de la Producción a los que había asistido. Averiguó más por Internet y se contactó con una empresa especializada en factoring. Ahora canaliza a través de este mecanismo una parte importante de sus cobros. Así, recibe el dinero mucho antes y sus problemas de falta de liquidez están quedando en el pasado.
Renzo recuerda que al inicio la mayor dificultad fue informar a sus clientes y hacerles entender que al hacer uso de este mecanismo ya no tendrían que pagarle a su empresa, sino a la empresa de factoring. Pero una vez superado este inconveniente, los procesos de cobranza son mucho más rápido y eficientes para todas las partes.
Mario Rangel es otro pequeño empresario que ofrece servicios a empresas industriales de diversos rubros. Hace más de un año empezó a usar facturas negociables para acelerar sus cobros. Gracias a ello, su empresa PURIFISAGLOBA SAC ha podido disponer de liquidez para atender sus obligaciones y seguir invirtiendo.
El proceso es muy rápido y sencillo. “Lo primero es que el cliente selle la factura negociable, luego la lleve a la empresa de factoring, que me da unos documentos que debo firmar como garantías. Luego le mando un correo al cliente para confirmar la factura y listo. El tiempo que tarda en llegar el dinero es entre 24 y 48 horas”, resalta este empresario.
El factoring o factura negociable, es una poderosa herramienta para mejorar la liquidez de las empresas y permitirles acceder a financiamiento a tasas favorables. En 2016, las operaciones con estos instrumentos totalizaron S/2.465 millones, lo que equivale al 0,37% del PBI peruano de ese mismo año. Para el 2017, la meta es duplicar ese monto. En los primeros siete meses del año, el monto negociado llegó a S/2.475 millones.
A un plazo más largo, se espera que las operaciones con facturas negociables lleguen a representar el 2% del PBI del país dentro de cuatro años. La difusión de este mecanismo será un impulso importante sobre todo para las micro y pequeñas empresas, pues les ofrece una alternativa para acceder a financiamiento con condiciones favorables y así evitar la descapitalización.
Cabe indicar que el Ministerio de la Producción (PRODUCE) promueve el financiamiento de las MIPYME a través de la Factura Negociable, poderosa herramienta financiera que permite a las empresas convertir sus facturas pendientes de pago en dinero en efectivo de forma rápida.
Entérate más en www.facturanegociable.gob.pe
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