Este 4 de junio se conmemora el centenario de Nicomedes Santa Cruz, día central del Mes de la Cultura Afroperuana. Diversas voces desde la historia, la música y la literatura coinciden en que su trabajo debe ser revisitado más allá del homenaje.
Al hablar de Nicomedes Santa Cruz, lo primero que quizá venga a la memoria sean los versos de A cocachos aprendí, aquel poema sobre el estudiante de antaño que relata la dureza de su aprendizaje, o quizá de La pelona, la décima de pie forzado que describe la transformación de una mujer negra que abandona su identidad para imitar a las mujeres blancas de clase alta.
Sin embargo, estas obras representan solo una pequeña parte de la amplia y diversa trayectoria de este hombre ilustre de sonrisa radiante y enorme bigote. Nicomedes fue mucho más que eso; más allá de ser un herrero, decimista, músico, investigador, activista, político o un hombre de radio, fue un incansable gestor cultural.
Como bien lo expresó su sobrino, Octavio Santa Cruz, en una transmisión en vivo para Lima Lee en 2022: "Él era un tremendo gestor que nunca descansaba, siempre estaba haciendo distintas cosas".
Este 4 de junio se conmemora el centenario de su nacimiento y día central del Mes de la Cultura Afroperuana. Diversas voces desde la historia, la música y la literatura coinciden en que su trabajo debe ser revisitado más allá del homenaje.
Poeta e intelectual
Para el historiador Fred Rohner, existen tres elementos fundamentales en la obra de Nicomedes Santa Cruz que permitieron "recolocar al sujeto afrodescendiente dentro del espacio político y social del Perú". El primero es su rol como poeta, que lo posiciona como una figura importante dentro de la literatura peruana. El segundo es su aporte a la música afroperuana, no solo como intérprete o compositor, sino como curador de una identidad musical propia. Y el tercero es su trabajo como investigador, mediante el cual sistematizó y preservó el folclore afroperuano a través de publicaciones, grabaciones y archivos que son referencia obligada.
"Una de las primeras cosas que se deben reconocer es que fue poeta", afirma a RPP. "Aunque en cada vez hay más esfuerzos por incluirlo en el canon literario peruano, aún no ocupa el lugar que le corresponde. Es uno de los grandes poetas entre la generación del 50 y la del 60".
Según Rohner, sus temas eran más actuales y confrontativos que los de muchos de sus contemporáneos.
"Sus trabajos comenzaron a publicarse a fines de la década de 1950, pero esto ha sido muchas veces subestimado, pese a que dedicó gran parte de su esfuerzo a la actividad literaria. Publicó numerosas obras que, además, fueron ampliamente reconocidas y bien recibidas".
La herencia artística de Nicomedes Santa Cruz
En el ámbito artístico, la labor de Nicomedes Santa Cruz fue más allá de la composición o la música. Según Rohner, fue un curador musical que dio forma y autonomía a un género que antes era solo una parte de la música criolla.
El historiador agrega que Santa Cruz creó un espacio independiente para la música afroperuana, lo que permitió que agrupaciones posteriores, como Perú Negro, le dieran una identidad más definida.
"El peso musical de Nicomedes Santa Cruz no está en el hecho de haber compuesto canciones sino en haber recreado un género nuevo en ese sentido, pese a que era un género del que se tenían noticias, pero se desconocía musicalmente".
Nicomedes no solo rescató ritmos olvidados como el landó, la zamacueca, el alcatraz o el panalivio, sino que también los recreó junto a figuras como Vicente, Abelardo, Porfirio y Pipo Vásquez, así como el guitarrista Carlos Hayre.
"El creador de ese universo musical va a ser Nicomedes Santa Cruz. Estos géneros, que hoy se aprenden en academias de folclore, fueron rescatados del olvido y reconstruidos a través del trabajo ideológico y artístico de Santa Cruz".
Miki González: "Nicomedes Santa Cruz es mi héroe. Antes de él, todo se adaptaba al gusto de los blancos"
Coincidiendo con lo expuesto por el historiador, el músico y productor Miki González dijo que Nicomedes fue quien dio visibilidad a los afrodescendientes en el Perú. De hecho, asegura que su aprendizaje sobre lo afro comenzó con él.
Según cuenta, recuerda a Nicomedes conduciendo un programa en horario estelar para la televisión nacional, donde ofrecía una representación auténtica de la cultura afroperuana, algo poco común en el contexto social del siglo XX.
"Por los prejuicios y la manera en que era la sociedad en el siglo XX, [una representación auténtica de la cultura afroperuana] era muy difícil de ver. Siempre había que modificar todo para adaptarlo al gusto de los blancos", menciona a RPP el autor de Akundun, canción a la que agregó un fragmento de la décima de Nicomedes, Ritmos Negros del Perú.
González considera que hay una visión estereotipada que muchas personas tienen sobre la peruanidad, principalmente debido a la falta de información adecuada.
"Las versiones auténticas de la cultura nunca eran realmente auténticas, eran distorsionadas y diluidas para que todo el mundo pudiera consumirlas, lo que las tergiversaba. Eso sigue ocurriendo. Cuando se habla de peruanidad, mucha gente tiene una visión basada en estereotipos. Sin embargo, la cultura es muy profunda y tiene un sustento importante para entender quiénes somos en la actualidad, pero esa información no llega de forma correcta".
Agregó que aunque hay nuevas generaciones que están interesadas en la herencia cultural de Nicomedes, muchas veces acceden a versiones superficiales.
"Ni siquiera conocen referentes del mundo andino, como Picaflor de los Andes o Pastorita Huaracina. Los jóvenes de ahora no saben quiénes son, y la música que escuchamos actualmente está basada en lo que hicieron ellos en el siglo XX".
Nicomedes Santa Cruz como investigador
Como ya lo había adelantado Rohner, el tercer aspecto fundamental de Nicomedes Santa Cruz es su rol como investigador, epecialmente por haber propuesto categorías que hoy forman parte del estudio del folclore y de la música afroperuana.
Su trabajo sobre la décima, titulado La décima en el Perú y publicado por el Instituto de Estudios Peruanos, fue una auténtica investigación pionera, ya que, además de ser uno de los pocos que se dedicó a recopilar material casi olvidado -como cuadernos de decimistas dispersos entre las familias de estos escritores-, también lo sistematizó en discos como Cumanana y Socavón.
"Aunque muchos los consideran simplemente discos musicales, en realidad son tratados del folclore, archivos históricos que incluyen ilustraciones sobre cómo tocar la quijada o el cajón, y las estructuras básicas de algunos géneros musicales que él se dedicó a recrear. Esos discos son verdaderas tesis sobre el folclore afroperuano y deberían ser valorados como tales", menciona el historiador.
A su entender, Nicomedes Santa Cruz no está lejos de lo que realizaron investigadores como José Carlos Mariátegui o José María Arguedas. "Mientras el espacio del sujeto andino ya había sido abierto por González Prada, la labor intelectual de Nicomedes permitió que el sujeto afroperuano tuviera una participación activa e importante en ese mismo espacio. Ese mérito se le debe a él".
"Nicomedes tenía el propósito de devolver al sujeto afrodescendiente un lugar en la vida social y política del país".
La herencia de Nicomedes Santa Cruz, más que una fecha
Si bien Fred Rohner considera justo reconocer el 4 de junio -día del natalicio de Nicomedes Santa Cruz-, como la fecha central del Mes de la Cultura Afroperuana, considera que es fundamental ir más allá de la conmemoración.
"Cuando uno habla solo de lo afroperuano, es como darle un lugar anexo o un apéndice; creo que Nicomedes debe ser pensado como uno de los grandes intelectuales del Perú, no solo como un gran intelectual afroperuano. Esa fecha debe servir como punto de partida para debatir cuál es el papel de los afroperuanos en el entramado de las ideas y las acciones sociales en el Perú".
Mientras tanto, Miki González, en una línea cercana al historiador, opinó que declarar junio como el Mes de la Cultura Afroperuana podría, en su forma más extrema, terminar percibiéndose como una estrategia de marketing.
"Casi al estilo del Día de la Madre o de la Navidad. En esas fechas, casi nadie recuerda el origen, se trata más del consumo y las ventas. Lo importante es que se destaque el trabajo de Nicomedes y que no se pierda".
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