
Los ganaderos cubanos podrán vender libremente sus excedentes de carne, leche y productos lácteos siempre que cumplan con sus compromisos de entregas al Estado, según anunció el Gobierno de Cuba.
Esta medida ,que llega en medio de una fuerte escasez de alimentos en el país caribeño, forma parte de un paquete de 63 medidas aprobadas por el Gobierno para "potenciar la producción de alimentos".
Cabe recordar que desde 1963 se prohibió a los cubanos sacrificar sus vacas o vender carne y subproductos sin permiso del Estado, después de que el paso de un huracán acabara con el 20% del ganado de la isla.
Los productores privados podrán comercializar estos productos siempre y cuando "no haya decrecimiento de la masa ganadera", según anunció el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel.
Por el momento, el Estado seguirá comprándole a los productores el litro de leche de vaca a 7,5 pesos cubanos (US$ 0.30) y a 9 pesos (US$ 0.37) cuando este "cumpla o sobrecumpla el plan de entrega mensual a la industria".
El paquete de medidas incluye también la reducción de las tarifas de electricidad y agua en todas las actividades agropecuarias, otro asunto que había centrado las reclamaciones de los campesinos, en especial desde principios de este año cuando el proceso de unificación monetaria y cambiaria disparó los precios.
La agencia EFE reporta que los altos precios de los alimentos y el difícil acceso a ellos debido al desabastecimiento han sido motivo de descontento popular durante muchos años en Cuba y la situación se ha agravado en el último año a consecuencia de la pandemia del coronavirus y el endurecimiento del embargo de Estados Unidos.
Se calcula que Cuba importa más del 80 % de los víveres que consume, lo cual representa un gasto anual de US$ 2,000 millones.
(Con información de la Agencia EFE).