Recomendaciones las brindó Edgar Gonzáles, director general de la División de Cómputo de Toshiba para América Latina.
Las netbook se han convertido en uno de los equipos de cómputo más móviles, debido a su tamaño y peso, que los hacen ideales para llevar de un lado a otro, ya sea en la escuela o en viajes de trabajo, en los cuales cumplen una de sus principales funciones: la navegación en Internet. Debido a ellos pueden volverse más sensibles ante ciertas situaciones, por ello debes tener en cuenta sencillas prácticas que te ayudarán obtener un mejor aprovechamiento y vida de tu netbook:
Instalar un antivirus y tenerlo actualizado diariamente. Es vital, ya que el uso de estos equipos (constantemente conectados a redes, Internet y compartiendo archivos) los hace altamente vulnerables. Simultáneamente, configurar Windows para actualizar constantemente el sistema operativo es algo que tampoco debes olvidar.
Comprar una batería adicional o de larga duración. La mayoría de las netbooks cuentan con una batería de 3 celdas, que da una autonomía de 3 a 4 horas, aproximadamente. Si ello no es suficiente para ti, no debes sentirte limitado ya que puedes adquirir una batería de 6 celdas, que te dará autonomía de aproximadamente 11 horas y con ello, mayor libertad fuera de casa, escuela u oficina.
Al ser equipos pequeños y transportables, muchos de los usuarios usan sus netbooks no solamente para trabajar o estudiar sino también para actividades de entretenimiento como navegar en Internet, escuchar música o chatear con amigos.
Esta facilidad hace que los equipos sean llevados en mochilas para meterse y sacarse con mayor facilidad, de un momento a otroÂÂÂ
sin la precaución de ponerlos en "suspensión" antes de hacerlo, lo cual puede provocar daños al disco duro. La recomendación para evitarlo es que configures la netbook de tal manera que al cerrarla el disco duro entre en hibernación de una manera fácil y rápida.
Tienes con ello la ventaja de que al reiniciar tu computadora el área de trabajo y los archivos estarán en el mismo estatus en que los dejaste al hacer la suspensión; esta acción apaga la pantalla y disco duro utilizando una mínima cantidad de energía, por lo que el reinicio es muy rápido. Puedes hacer esto para volver a usar tu netbook en periodos cortos, por ejemplo, para ir de un salón a otro.
Otra de las alternativa es la hibernación, muy similar a la anterior pero que apaga completamente la unidad, dejándola en un estado de reinicio y con los archivos y aplicaciones en el mismo estado que en el momento en el que se le dio la orden, aunque su reinicio es un poco más lento. Puedes utilizar la hibernación para volver a usar el equipo en dos o tres horas (tal vez, después de una larga junta de trabajo).
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