Recordada por interpretar a la icónica Rubí, la actriz reveló también que fue abandonada por su madre.
Bárbara Mori saltó a la fama al interpretar a Rubí en la telenovela del mismo nombre, una hermosa y malvada mujer, que buscaba salir de la pobreza a toda costa, aunque eso implicara separarse del amor de su vida, Alejandro (Eduardo Santamarina), un joven estudiante de medicina que queda perdidamente enamorado de ella.
Aunque Mori es famosa por su talento y belleza, poco se sabía se su infancia y juventud, hasta que ha publicado el podcast titulado “Se regalan dudas”, en el que hace una serie de revelaciones acerca de su infancia, una que describe como “triste, dura y violenta”, debido a que su padre fue alcohólico y su madre la abandonó.
“He compartido poco de lo que soy, de dónde vengo y cómo crecí. Tuve una infancia súper dura, triste, violenta y muy alejada del amor. Crecí sin mamá y crecí con un padre alcohólico”, reveló y aseguró que esa difícil situación la llevó a abandonar su casa y buscar independizarse a toda costa.
“Empecé a trabajar a los 14 años. Hice de todo un poco. Fui mesera en una pizzería, repartía volantes en los semáforos, fui booker en una agencia de modelos y bailé en antros”, contó la actriz. De esa manera, ahorró dinero y pudo salir de casa a los 17 años.
Más tarde, su talento y belleza la acercaron al mundo del modelaje, pero el contacto con las cámaras le dio una perspectiva más amplia de lo que quería hacer en su vida, por lo que se decidió convertirse en actriz. Ello, no obstante, no hizo que la actriz acertara al elegir a sus parejas en la adultez.
“Tenía todo lo que según la sociedad te lleva a la felicidad. Fama y dinero, pero yo conocí el amor a base de golpes y el abandono de mi madre. Entonces el amor era para mí eso (...) Me empecé a relacionar con hombres en relaciones destructivas y tóxicas”, reveló Bárbara Mori.
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