El exesposo de la “princesa del pop”, Kevin Federline, acusó al padre de la artista de romper una puerta y sacudir violentamente a su hijo de 13 años.
Tras años de altibajos emocionales, parece que la paz aún no llega a la vida de la intérprete de “Toxic”, Britney Spears, quien se encuentra nuevamente envuelta en un escándalo familiar que involucra a uno de sus hijos, su padre y su exesposo, Kevin Federline.
Federline, con quien la cantante se casó en setiembre de 2004 (divorciándose en noviembre del 2006) ha acusado al padre de la artista, Jamie Spears, de haber agredido físicamente de su hijo mayor, Sean Preston, de solo 13 años de edad.
El abogado de derecho familiar de Los Ángeles, Mark Vincent Kaplan, ha hablado en representación del bailarín con la revista People, asegurando que el accidente se desarrolló la noche del 24 de agosto, cuando Sean Preston y su hermano menor de 12 años estaban de visita con Britney Spears en la casa de sus abuelos.
De acuerdo con la versión de Federline, el padre de Spears y el pequeño Sean Preston tuvieron un fuerte intercambio de palabras, por lo que el menor se encerró en una de las habitaciones. Jamie Spears habría roto la puerta del cuarto en el que este se encontraba, y lo habría sacudido violentamente.
“Hubo un desacuerdo que ocurrió mientras Britney y los niños estaban visitando a Jamie en su casa y lo condujo a un altercado físico que fue observado por Jayden. (…) Britney hizo lo correcto y retiró a los niños y los sacó de allí, pero el trauma persiste", aseguró el abogado de Federline.
Los investigadores tomaron cartas en el asunto, entrevistaron a los testigos presentes y entregaron el material recogido a la Oficina del Fiscal del Distrito. Fue así que un juez falló a favor de la orden de restricción que impuso Federline, en consecuencia, el padre de Britney Spears ya no tiene permitido tener contacto alguno con sus dos nietos, de acuerdo con The Blast.
UN CAMBIO EN LA CUSTODIA
Antes de que sucediera este incidente, Federline y Spears tenían la custodia compartida de sus hijos y ambos poseían el 50% del tiempo. Sin embargo, tras la violenta reacción del padre de la cantante, Kevin ha obtenido la mayoría de la custodia, al recibir el 70% de la misma.
Cabe recordar que Jamie Spears es el administrador y garante de la estrella del pop desde el 2007, año en el que la intérprete de “Crazy” protagonizó un episodio de crisis en público, fue internada en un centro de salud mental y perdió la custodia de sus hijos momentáneamente.
Por el momento, ni la cantante ni los representantes de Federline se han pronunciado de manera pública al respecto, puesto que los abogados de Spears pidieron resolver los problemas en privado.
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