Conrad Murray mantendrá su licencia médica al menos hasta el 14 de junio, donde se realizará una nueva vista del caso de la muerte de 'rey del pop'.
El doctor Conrad Murray podrá seguir ejerciendo
la medicina al menos hasta el próximo 14 de junio, fecha fijada hoy para una
nueva vista sobre el caso de la muerte de Michael Jackson en el que está
acusado de homicidio involuntario.
El juez Michael Pastor, de la Corte Superior del condado de Los Ángeles, pospuso decidir sobre la revocación de la licencia de Murray hasta dentro de dos meses, tiempo en el que el médico será libre de atender pacientes en California (EE.UU.), si bien no podrá recetarles calmantes o anestésicos.
El magistrado, designado hoy para llevar el proceso legal para dirimir la responsabilidad de Murray en el fallecimiento del "rey del pop", celebró una breve vista que resultó de trámite en la que emplazó a los abogados a exponer sus argumentos el 14 de junio.
Fue la segunda vez que Conrad Murray, de 57 años, compareció ante la Corte después de que el 9 de febrero la fiscalía le acusara formalmente de homicidio involuntario respecto al repentino final de Michael Jackson.
Decenas de fanáticos del "rey del pop" se concentraron a la entrada de los juzgados para recordar a su ídolo fallecido, cantaron alguno de sus temas como "We Are The World" y pidieron "Justicia para Michael", según se leía en alguno de los lemas que portaban los seguidores del artista, algunos llegados desde Europa.
Murray coincidió en la sala con los familiares de Jackson, entre ellos sus padres, Joe y Katherine, así como sus hermanos Janet y Jermaine.
Los días previos la fiscalía había solicitado al tribunal que inhabilitara a Murray en California hasta que se resolvieran los cargos en su contra y en respuesta a una petición de las autoridades sanitarias del estado.
Un requerimiento que, según el abogado del doctor, Edward Chernoff, dejaría a Murray en la ruina, incapaz de hacer frente a los cargos del proceso.
A pesar de la expectativa mediática generada, el juez Pastor optó por retrasar su decisión a ese respecto hasta la próxima sesión, en la que también se espera que se ponga fecha a la vista preliminar del juicio. Murray carece actualmente de pacientes en California, aunque reanudó su práctica profesional en Houston (Texas) y en Las Vegas (Nevada).
El temor del médico es que una hipotética pérdida de su licencia en California desencadene medidas similares en los otros dos estados donde trabaja. En caso de que este proceso termine en un juicio, como es de prever, Murray se enfrentará hasta una pena máxima de 4 años de cárcel si fuera declarado culpable. Actualmente el médico se encuentra en libertad bajo una fianza de 75.000 dólares.
Michael Jackson falleció el pasado 25 de junio víctima de una intoxicación aguda de medicamentos, en especial del anestésico de uso hospitalario propofol, que el doctor Murray confesó haber administrado al cantante para ayudarle a conciliar el sueño. Tras una investigación que duró meses, el médico fue considerado responsable de la muerte de Jackson por la fiscalía.
La defensa de Murray desmintió hoy la noticia publicada el fin de semana por la web TMZ en la que se aseguraba que los abogados del médico argumentarían que Jackson se mató accidentalmente a sí mismo al aprovechar la ausencia del doctor en su habitación para inyectarse la sobredosis de propofol que acabó con su vida.
"En este momento es prematuro anunciar cuál será la estrategia de nuestra defensa cuando ni siquiera hemos llegado hasta la vista preliminar del caso", explicó a Entertainment Weekly Miranda Sevcik, portavoz del abogado de Murray, Edward Chernoff.
Paralelamente a este proceso, el padre de Michael Jackson, Joe Jackson, anunció que iniciará en menos de tres meses una demanda por lo civil contra Murray por negligencia que conduciría a una indemnización económica.
EFE
El juez Michael Pastor, de la Corte Superior del condado de Los Ángeles, pospuso decidir sobre la revocación de la licencia de Murray hasta dentro de dos meses, tiempo en el que el médico será libre de atender pacientes en California (EE.UU.), si bien no podrá recetarles calmantes o anestésicos.
El magistrado, designado hoy para llevar el proceso legal para dirimir la responsabilidad de Murray en el fallecimiento del "rey del pop", celebró una breve vista que resultó de trámite en la que emplazó a los abogados a exponer sus argumentos el 14 de junio.
Fue la segunda vez que Conrad Murray, de 57 años, compareció ante la Corte después de que el 9 de febrero la fiscalía le acusara formalmente de homicidio involuntario respecto al repentino final de Michael Jackson.
Decenas de fanáticos del "rey del pop" se concentraron a la entrada de los juzgados para recordar a su ídolo fallecido, cantaron alguno de sus temas como "We Are The World" y pidieron "Justicia para Michael", según se leía en alguno de los lemas que portaban los seguidores del artista, algunos llegados desde Europa.
Murray coincidió en la sala con los familiares de Jackson, entre ellos sus padres, Joe y Katherine, así como sus hermanos Janet y Jermaine.
Los días previos la fiscalía había solicitado al tribunal que inhabilitara a Murray en California hasta que se resolvieran los cargos en su contra y en respuesta a una petición de las autoridades sanitarias del estado.
Un requerimiento que, según el abogado del doctor, Edward Chernoff, dejaría a Murray en la ruina, incapaz de hacer frente a los cargos del proceso.
A pesar de la expectativa mediática generada, el juez Pastor optó por retrasar su decisión a ese respecto hasta la próxima sesión, en la que también se espera que se ponga fecha a la vista preliminar del juicio. Murray carece actualmente de pacientes en California, aunque reanudó su práctica profesional en Houston (Texas) y en Las Vegas (Nevada).
El temor del médico es que una hipotética pérdida de su licencia en California desencadene medidas similares en los otros dos estados donde trabaja. En caso de que este proceso termine en un juicio, como es de prever, Murray se enfrentará hasta una pena máxima de 4 años de cárcel si fuera declarado culpable. Actualmente el médico se encuentra en libertad bajo una fianza de 75.000 dólares.
Michael Jackson falleció el pasado 25 de junio víctima de una intoxicación aguda de medicamentos, en especial del anestésico de uso hospitalario propofol, que el doctor Murray confesó haber administrado al cantante para ayudarle a conciliar el sueño. Tras una investigación que duró meses, el médico fue considerado responsable de la muerte de Jackson por la fiscalía.
La defensa de Murray desmintió hoy la noticia publicada el fin de semana por la web TMZ en la que se aseguraba que los abogados del médico argumentarían que Jackson se mató accidentalmente a sí mismo al aprovechar la ausencia del doctor en su habitación para inyectarse la sobredosis de propofol que acabó con su vida.
"En este momento es prematuro anunciar cuál será la estrategia de nuestra defensa cuando ni siquiera hemos llegado hasta la vista preliminar del caso", explicó a Entertainment Weekly Miranda Sevcik, portavoz del abogado de Murray, Edward Chernoff.
Paralelamente a este proceso, el padre de Michael Jackson, Joe Jackson, anunció que iniciará en menos de tres meses una demanda por lo civil contra Murray por negligencia que conduciría a una indemnización económica.
EFE
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