Reyna Pachas llama a la policía para avisar que tiene atado a “Recursos” Reyes y cuando Charo regresa del penal tras ver a su hijo y su familia queda detenida.
Reyna descubre a Coqui en el cuartucho de Pepe y Tito y con la ayuda de su madre Emperatriz y su marido Lucho, lo atan. Ella llama a la policía para avisar que ha capturado al prófugo y de paso cobrar la recompensa por su captura.
Charo, Teresa y Fernanda regresan del penal tras haber visitado a su familia y al llegar a su casa se encuentran con que se está realizando un operativo policial. “¡¿Qué es lo que pasa acá?!”, exclama Teresa. Y Charo no tiene más remedio que confesarle que Coqui está dentro de la casa. Poco después, la policía saca a Coqui esposado y Charo se desespera.
“¡Ahí está! ¡Es la cómplice de Coqui! ¡Deténganla y mándela al penal!”, grita Reyna. El mayor de la policía ordena detener a Charo acusándola de ser cómplice del prófugo de quien dice que es un criminal de marca mayor.
“¡Soy inocente!”, clama Charo mientras Fernanda y Teresa dicen a gritos que su único delito ha sido relacionarse con un delincuente. Igual Coqui y Charo son trasladados a la comisaría y colocados en la misma celda. “¡Nunca te voy a perdonar esto!”, le reclama Charo pero Coqui le dice que nunca le hará daño y que pronto ella dejará la celda. “¡Comisario! ¡Voy a hablar!”, dice Coqui llamado al jefe de la comisaría.
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