La actriz vivió en Ayacucho, en un pueblito donde la gente vive del pastoreo de animales, de la agricultura y en donde todos son ronderos
Diazena y Leoncio viven como todos los habitantes de San José de Ticllas (Ayacucho) haciendo de todo para subsistir. Pastorean animales desde el alba y para eso se levantan a las 4 de la madrugada. Es la mejor hora aseguran.
Casi a oscuras preparan sus alforjas con desayuno y almuerzo porque la jornada que les espera es tremendamente larga. Una vez que salen de casa no regresan sino hasta que el sol se ha ocultado, ella pasadas las 6 de la tarde, él como a las 9 de la noche.
Ellos pastorean animales de otras personas, vacas, cabras y ovejas y por esta actividad reciben un sol diario cada uno. Claro que este trabajo lo hacen mientras cosechan o siembran en su chacra, papas, maíz, trigo y habas, para su propio consumo. No se puede descuidar la tierra que les da de comer, dicen.
Leoncio suele pescar cuando el río trae truchas, gordas y grandes y Diazena por su parte, da rienda suelta a su imaginación en bordados sobre bayetas para la venta. Lamentablemente, el negocio no es de ella, por eso recibe tan sólo 15 soles al mes. Poquísima paga para las maravillas que ella hace con sus manos.
En esta familia solo descansa Brayan, de tres años y ocho meses, el único hijo de ambos, que ya conoce lo que es un wawasi.
Esta familia conoció a la actriz Laly Goyzueta quien vivió en carne propia cómo se vive en nuestras alturas y cuánto se hace por recibir tan poco.
Este sábado no se pierda esta historia en "Vidas Extremas" de "Fuego Cruzado", a las 10 de la noche por ATV
Casi a oscuras preparan sus alforjas con desayuno y almuerzo porque la jornada que les espera es tremendamente larga. Una vez que salen de casa no regresan sino hasta que el sol se ha ocultado, ella pasadas las 6 de la tarde, él como a las 9 de la noche.
Ellos pastorean animales de otras personas, vacas, cabras y ovejas y por esta actividad reciben un sol diario cada uno. Claro que este trabajo lo hacen mientras cosechan o siembran en su chacra, papas, maíz, trigo y habas, para su propio consumo. No se puede descuidar la tierra que les da de comer, dicen.
Leoncio suele pescar cuando el río trae truchas, gordas y grandes y Diazena por su parte, da rienda suelta a su imaginación en bordados sobre bayetas para la venta. Lamentablemente, el negocio no es de ella, por eso recibe tan sólo 15 soles al mes. Poquísima paga para las maravillas que ella hace con sus manos.
En esta familia solo descansa Brayan, de tres años y ocho meses, el único hijo de ambos, que ya conoce lo que es un wawasi.
Esta familia conoció a la actriz Laly Goyzueta quien vivió en carne propia cómo se vive en nuestras alturas y cuánto se hace por recibir tan poco.
Este sábado no se pierda esta historia en "Vidas Extremas" de "Fuego Cruzado", a las 10 de la noche por ATV
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