El delantero holandés no perderá su ojo tal como se temía luego de jugar por el Fenerbahce.
El delantero holandés Robin Van Persie (33 años) dijo que el ojo izquierdo se encuentra bien y que sólo tiene un pequeño desgarro en el párpado, después de retirarse el domingo por un codazo durante un encuentro entre el Fenerbahce contra el Akhisar Belediye.
“Tengo un pequeño desgarro en el párpado y después de las pruebas en el hospital puedo decir que mi ojo no está dañado, así que todo bien”, dijo el futbolista holandés en su perfil en las redes sociales. “En el fútbol pasan estas cosas”, señaló el veterano delantero tulipán.
Pasada la media hora de partido, Robin Van Persie, que abrió el marcador para su equipo poco antes, fue golpeado con el codo por el francés Abdoul Sissoko en la puja por un balón dividido. El atacante fue retirado del terreno de juego rápidamente y sustituido por el nigeriano Emmanuel Emenike.
El médico del club de Estambul, Burak Kunduracioglu, indicó que Van Persie, que fue trasladado a un hospital, sufrió un desgarro y sangró por los párpados y que existía el riesgo de que pudiera perder el ojo izquierdo.
Comparte esta noticia