Una jugada que parecía inofensiva terminó por convertirla en la más sonada del fin de semana en el fútbol inglés.
En choque por la fecha 33 de la Premier League, Tottenham Hotspur aplastó por 3 a 0 al Manchester United, con la que mantuvo su pelea en los primeros lugares de la competencia. Durante este encuentro se realizó la gresca más sonada del fin de semana en el fútbol Inglaterra.
En un tramo del partido los jugadores Kyle Walker y Memphis Depay, quien suele utilizar chimpunes extraños, peleaban el balón cerca de la línea del lateral, en donde no quedaron contentos con los simples forcejeos y se encendieron las picas y los agarrones e insultos casi llegan a una pelea de box.
Los dos estuvieron varios segundos tomados de las camisetas diciéndose de todo, hasta que se tuvieron que meter empleados de seguridad del estadio para separarlos. Después de esto el árbitro sólo los amonestó con tarjeta amarilla.
Con esta gran victoria del Tottenham se mete en el segundo lugar con 65 puntos en la Premier League. Por otro lado, el Manchester se quedó con 53 unidades y se estancó en el quinto puesto. El líder Leicerster City lleva 72 unidades y se perfila como un nuevo campeón del campeonato.
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