Los ultras del CSKA de Sofia protagonizaron un nuevo capítulo de violencia en un campo de fútbol.
Se jugaba el minuto 91 del partido amistoso entre CSKA Sofia de Bulgaria y el Ahdod de Israel, y el marcador estaba 0-1 a favor de los medio orientales cuando se desató una batalla campal.
Uno de los jugadores del equipo israelí cometió una dura falta que le costó la expulsión inmediata y la reacción de los hinchas del CSKA Sofia de Bulgaria.
Los seguidores del equipo búlgaro no se quedaron tranquilos y arremetieron contra los jugadores rivales invadiendo el campo de juego.
Los ultras, como se le conoce al equipo CSKA Sofia, comenzaron a corretear y lanzar botellas a los futbolistas israelíes que al ver la violenta embestida se vieron obligados a abandonar el estadio por las gradas.
Comparte esta noticia