Los detenidos han sido denunciados por perturbación de la paz y violación de ley de no violencia en los estadios deportivos y podrían ser encarcelados.
Un fiscal paraguayo imputó hoy (jueves) a los 38 hinchas del Colón de Santa Fe argentino que fueron detenidos el martes en Asunción por los presuntos cargos de perturbación de la paz y violación de ley de no violencia en los estadios deportivos.
El fiscal Cristian Bernal informó de que presentó la imputación contra los hinchas argentinos ante el Juzgado Penal de Garantías de turno, que determinará si los detenidos, que se encuentran en una dependencia policial, serán traslados a la penitenciaría nacional de Tacumbú, en esta capital.
"Esto no hay que complicarlo más, son hinchas de fútbol, algunos de ellos bastante agresivos y (...) no creo que sean bien recibidos en la penitenciaría nacional. Hay que tener mucho cuidado", advirtió Bernal en declaraciones a la radio Primero de Marzo.
Mencionó, además, que los 38 detenidos, entre ellos tres menores de edad, tendrán que permanecer en el país para responder al proceso penal paraguayo.
"No tengo apresuramientos, tampoco la intención de extender el proceso más de lo debido", abundó.
Los hinchas del Colón fueron detenidos tras el partido disputado en el estadio del Cerro Porteño, uno de los clubes más populares de Paraguay que, en ese encuentro marcado por los disturbios en la grada visitante, selló su pase a cuartos de final de la Sudamericana al imponerse por 2-1.
El encuentro se vio marcado por los enfrentamientos a pedradas entre hinchas locales y argentinos durante el entretiempo del juego, agravados en el segundo tiempo, lo que llevó al árbitro uruguayo Darío Ubriaco a interrumpir el partido durante 18 minutos.
El Colón, por su parte, denunció el miércoles que la delegación y los hinchas que acompañaron al equipo fueron víctimas de agresiones y discriminación por parte de la policía paraguaya.
EFE
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