Tras haber perdido dos finales el capitán del cuadro bávaro se siente más tranquilo ya que no sabe cuando se volverá a presentar una oportunidad similar.
El capitán del Bayern Munich, Philipp Lahm, admitió hoy que haber ganado la Liga de Campeones fue un alivio para su equipo tras haber perdido dos finales de esa competición en los últimos tres años.
"Ha sido un alivio. Si uno pierde por tercera vez una final de la Liga de Campeones no sabe si vuelve a tener la oportunidad de ganar la competición. Por eso la presión hoy fue enorme y eso se notó al comienzo del partido", dijo Lahm en declaraciones a la Segunda Cadena de la Televisión Alemana (ZDF).
Lahm, interrogado sobre su celebración particular con Bastian Schweinsteiger, recordó que los dos vienen jugando juntos desde las categorías juveniles del Bayern, que son el rostro de una generación importante de jugadores alemanes y que hoy ganaron su primer título internacional.
"Si pretendemos ser una generación de oro, necesitamos títulos internacionales", dijo Lahm.
EFE
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