Según la prensa italiana, el jugador camerunés estudia dejar al cuadro de Milán para mudarse al club ruso, que no duda en poner sobre la mesa un millonario contrato.
El delantero camerunés Samuel Eto"o, ex jugador de Barcelona, se plantea la posibilidad de abandonar el Inter de Milán este verano y fichar por el club ruso Anzhí de Majachkalá, asegura el diario deportivo italiano "La Gazzetta dello Sport".
Según el rotativo, las próximas 48 horas serán decisivas para el futuro de Eto"o, pues este martes llega a Milán (norte de Italia) para abrir oficialmente las negociaciones con el delantero un representante del Anzhí, club en el que juega el lateral izquierdo brasileño Roberto Carlos, también ex del Real Madrid.
"La Gazzetta dello Sport" afirma que el club ruso le ha propuesto ya un contrato de tres años a razón de 20 millones netos por temporada, aunque Eto"o ha planteado la posibilidad de fichar por un año más, cuatro, con la misma remuneración anual.
En cuanto a lo que el Anzhí está dispuesto a pagar al Inter, con quien Eto"o tiene contrato dos años más, el rotativo asegura que el club ruso se plantea en un principio pagar 20 millones de euros, aunque puede estar dispuesto a subir hasta los 30 millones.
De la posible salida de Eto"o del Inter ya se habló el pasado junio, cuando el camerunés dio una entrevista a una televisión de su país en la que hablaba de "algunas propuestas" de otros clubes (la que más le atraía venía de la Liga inglesa), sobre las que decidiría tras las vacaciones.
Según "La Gazzetta dello Sport", el delantero camerunés ha pedido recientemente al presidente del Inter, Massimo Moratti, que le prorrogue un año más su contrato con el club milanés o que, al menos, le ofrezca nuevos incentivos económicos en forma de bonificaciones por los objetivos deportivos de la temporada.
Pero, añade el periódico, Moratti se ha negado a prometerle nada y esto parece que ha contrariado a Eto"o, quien llegó en 2009 al Inter y que tiene ahora que decidir si quiere marcharse a jugar a la Liga rusa que tiene una menor proyección internacional.
EFE
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