El equipo del peruano André Carrillo no pudo vencer al Gil Vicente en condición de visitante y de esta manera perdió la racha que había obtenido con Ricardo Sá Pinto.
El Gil Vicente cortó la buena racha que llevaba el Sporting de Lisboa desde la llegada de Ricardo Sá Pinto al banquillo verdiblanco y le ganó hoy clara y merecidamente por 2-0.
Esta derrota en la vigésimo tercera jornada de Liga en Portugal, relega a los lisboetas de la cuarta a la quinta posición, superados ya por el Marítimo, situándose además a 15 puntos del líder.
La derrota del Sporting pudo ser más amplia, ya que el Gil Vicente dispuso de varias ocasiones para aumentar el marcador, e incluso falló al poco de comenzar la segunda mitad y culminó el juego con un jugador más en el campo tras la expulsión del holandés Schaars.
El primer gol llegó a los 13 minutos por medio de Rodrigo Galo, que aprovechó un desconcierto en la defensa del Sporting; el segundo tanto llegó a los 55 tras una falta penal convertida por Claudio Rodrigo Siqueira.
El Sporting mejoró con el paso de los minutos, aunque fue incapaz de empatar la contienda antes de llegar al descanso. Sá Pinto, que dejó en la segunda mitad en el banquillo al chileno Matías Fernández y al brasileño Polga, vio pronto desmoronarse su intento de remontada.
El peruano André Carrillo ingresó a los 73 minutos por el español Diego Capel, no tuvo mucha participación en el juego, ya que a esa altura del partido el cuadro lisboeta con un hombre menos se dedicó a defender.
La derrota supone un duro golpe para el Sporting, que llegaba a este partido con la moral reforzada después de golear por 5-0 al siempre correoso Vitória de Guimaraes en la anterior jornada liguera y tras eliminar en octavos de la Liga Europa al Manchester City.
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