Se tiene la idea que la producción de Paolo Guerrero es mejor a nivel de selección que a nivel de clubes. Sin embargo, sus promedios dicen otra cosa. Ingresa a la nota y conoce sus números.
La capacidad goleadora de Paolo Guerrero a nivel de selección es incuestionable. Es casi un “pecado” decir lo contrario. Hay 35 razones que avalan al futbolista con mayor cantidad de anotaciones a lo largo de toda la historia de ‘La Blanquirroja”.
Pero ¿y a nivel de clubes? No tanto. ¿no tanto? Se tiene una percepción equivocada sobre la voracidad de Guerrero jugando en Alemania y Brasil, cuando su promedio de goles es igual (0.39).
Goleador histórico
No fue tarea fácil para Paolo Guerrero ni para cualquier otro atacante peruano superar los 26 goles marcados por Teófilo Cubillas. El actual capitán peruano recién pudo hacerlo en el 2016 cuando marcó el descuento de un partido que terminó igualado a dos frente a Venezuela en Lima por las Eliminatorias rumbo a Rusia 2018.
Eso no es todo. El delantero de Inter de Porto Alegre alcanzó un mejor promedio de goles que ‘El Nene’, Jefferson Farfán, Claudio Pizarro, Nolberto Solano, Osvaldo Ramírez, entre otros. Sólo viéndose superado por las 24 anotaciones en 32 encuentros de Teodoro ‘Lolo’ Fernández (0.75).
Dato: Con la camiseta peruano convirtió 35 tantos en 98 partidos. Su promedio es de 0.39 por partido.
¿Y a nivel de clubes?
También. ¿Alguien puede negar la capacidad goleadora de Pizarro? No. Para sorpresa de muchos, el promedio de anotaciones de Paolo Guerrero, a nivel de clubes, no está muy distante al de Claudio.
Vistiendo las camisetas de Werder Bremen, Bayern Munich, Chelsea y Colonia marcó 316 goles en 758 partidos obteniendo un promedio de 0.41. Paolo Guerrero en su paso Alemania y Brasil alcanzó un promedio de 0.39 tras convertir 212 goles en 535 juegos.
Jefferson Farfán -que también es de los tres mejores delanteros peruanos de los últimos 30 años- gritó gol en 176 ocasiones alternando en 560 partidos.
Acabemos con eso que Paolo Guerrero no es goleador. Si lo es, en su selección y también en los clubes que le tocó defender. Goles importantes, goles mundiales, de clubes y de selecciones. Que sus otras virtudes asociadas al juego no tapen su apetito por comerse las redes. Han sido ochos meses largos de ausencia, pero en abril, por fin ¡Acabou o caô!
Comparte esta noticia