Rusia 2018, un Mundial de desilusiones para Lionel Messi, Neymar y Cristiano Ronaldo

Rusia 2018 puede ser catalogado como el Mundial de las sorpresas o el que marcó un precedente con la incorporación del VAR, pero también como uno en el que las figuras no brillaron. Los tres finalistas para ganar la última edición del Balón de Oro, que fueron Lionel Messi, Cristiano Ronaldo y Neymar, tuvieron un desempeño intermitente en esta Copa del Mundo, aunque cada uno en diferentes contextos y de maneras distintas.

Por un lado, Lionel Messi era el centro de atención de una Selección Argentina que andaba de polémica en polémica y tenía a un entrenador como Jorge Sampaoli que transmitía cualquier cosa menos confianza y seguridad. No obstante, como en oportunidades previas, se pensaba que él iba a ser el salvador del conjunto albiceleste pero, al fin y al cabo, no lo fue del todo.

Un penal fallado en el empate con Islandia y una escasa producción en la goleada recibida a manos de Croacia pusieron en tela de juicio el liderazgo que podía tener Lionel Messi dentro del campo con el combinado albiceleste. No obstante, a pesar de poder lavarse la cara con actuaciones aceptables en el triunfo sobre Nigeria y caída ante Francia, la imagen con la que se despidió de Rusia 2018  no fue la mejor de todas.

Por otra parte, Cristiano Ronaldo llegaba a este Mundial después de ganar su tercera Champions League consecutiva con el Real Madrid y con el recuerdo de haber obtenido la Eurocopa 2016 con su selección hace dos años. A diferencia de Lionel Messi, su rendimiento fue de menos a más, otorgándole un punto de oro a Portugal en la primera fecha con un hat-trick en el empate 3-3 con España y su único triunfo en el certamen con un tanto en el 1-0 contra Marruecos.

Sin embargo, luego de dos buenos partidos en los que logró perfilarse como uno de los candidatos a ganar la Bota de Oro en Rusia 2018, Cristiano Ronaldo pasó como intrascendente en lo que a producción ofensiva de Portugal se refiere en el empate 1-1 con Irán, donde incluso erró un penal, y en la caída por 2-1 frente a Uruguay en los octavos de final.

Finalmente, Neymar lideraba a un Brasil que era considerado como el principal candidato a hacerse dueño del trofeo de este Mundial. Pero, en este caso, el delantero brasileño llegaba entre algodones por una lesión que lo dejó más de tres meses fuera de las canchas y solo le permitió jugar dos amistosos previos a Rusia 2018, donde la 'Canarinha' venció a Croacia y Austria. En ambos encuentros, el atacante del PSG marcó y fue desequilibrante.

Sin embargo, una vez comenzado el Mundial, Neymar se caracterizó por ser muy irregular dentro del gramado de juego más allá se presentar unos chispazos que generaban desorden en las defensas rivales. Al final, 'Ney' marcó solo un tanto y dio dos asistencias, participando directamente en 3 de los 8 goles de su equipo en el torneo. No obstante, en el momento más crítico, que fue en la derrota por 2-1 contra Bélgica, no estuvo acertado y se terminó resignando a ver a su selección despedirse en los cuartos de final.