El goleador histórico de la Selección Peruana fue ovacionado por los fanáticos luego de recibir 14 de meses de suspensión de parte del TAS, sanción que lo deja fuera del Mundial Rusia 2018.
Paolo Guerrero fue recibido este martes por cientos de personas a su llegada al aeropuerto internacional Jorge Chávez tras recibir una sanción de 14 meses de parte del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) por un resultado analítico adverso, castigo que lo dejó fuera del Mundial Rusia 2018.
"Estoy triste, pero vine aquí a mostrar la cara, ya que se especulaban muchas cosas, de muchas personas. Esto es una injusticia, ya lo he dicho", declaró ante la prensa en el aeropuerto Jorge Chávez. El delantero del Flamengo brasileño agradeció "el cariño de la gente", que se ha volcado en su apoyo, pero reiteró que "infelizmente" le "están quitando jugar la Copa del Mundo" y su carrera en el fútbol internacional.
"Primero, quería dejar en claro que estoy a muerte con mi selección. A mis compañeros yo los respaldo en las buenas y las malas, no tiene nada que ver mi situación con el resto de mis compañeros en el Mundial", enfatizó. El castigo del TAS responde a que en un control antidopaje realizado a Guerrero tras el partido jugado por Perú contra Argentina en Buenos Aires el 5 de octubre de 2017 se detectó benzoilecgonina, principal metabolito de la coca y sus derivados.
Fuera de Rusia
Inicialmente, la FIFA sancionó al jugador con un año de suspensión, pero después el comité de apelaciones del organismo internacional rebajó a seis meses la sanción, al considerar que el futbolista no consumió cocaína, sino que la sustancia provenía de una infusión que contenía restos de mate de hojas de coca.
Guerrero, que acaba de cumplir los seis meses de suspensión, recurrió al TAS para obtener su total absolución, a la vez que la Agencia Mundial Antidopaje (WADA) también presentó recurso al mismo para pedir una sanción mayor de entre uno y dos años. El TAS anunció el lunes que aceptó parcialmente el pedido de la WADA y aumentó la sanción al jugador hasta 14 meses, con lo que Guerrero terminará de cumplir su castigo el 13 de enero de 2019.
El tribunal argumentó que el jugador incumplió la normativa antidopaje y pese a "no pretender mejorar su rendimiento con la ingesta de una sustancia prohibida, actuó de manera negligente" por no haber evitado la comisión de una infracción de dopaje.