Doña María Elena Arispe Mesta, que es una vendedora ambulante, pidió ayuda a la Municipalidad de Surquillo para que pueda instalarse en un albergue o recuperar su casa.
Una anciana de 82 años se ha quedado sin un techo donde vivir, luego que su conviviente la desalojara de su vivienda en Surquillo, según ella misma denunció.
Sus vecinos de la calle Santa Rosa en el citado distrito, dijeron que la octogenaria pasó la noche a la intemperie y que ha sido despojada de la que fue su morada por más de 50 años.
"No es justo que la boten. Ella vende caramelos y galletas en Miraflores, tiene una carretilla", indicó una mujer que dijo conocer desde hace 20 años a doña María Elena Arispe Mesta.
Por su parte, la anciana sentada en una silla frente a todas sus pertenencias que ocupan el frontis de su casa, señaló que allí mismo pasó la noche.
"Dios es grande y poderoso porque he amanecido bien. Aunque tengo un dolor fuerte en el pecho, mal de la vista y de la columna, voy a trabajar", manifestó en declaraciones a RPP Noticias.
Sin embargo, doña María Elena pidió ayuda a la Municipalidad de Surquillo para que pueda instalarse en un albergue o recuperar su casa.
"No sé si el señor alcalde me puede ayudar, yo no tengo hijos por culpa de él (en alusión a su conviviente)...no sé a dónde irme, quizá con algún familiar", manifestó.
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