La policía supo que Adam Lanza quiso comprar un rifle días antes del ataque, pero no lo logró porque se rehusó a someterse a una verificación de antecedentes.
Adam Lanza, el asesino de Connecticut (Estados Unidos), tuvo una discusión con cuatro empleados de la escuela primaria Sandy Hook de Newtown, justo un día antes de que perpetrara la matanza de 27 personas, entre ellas 20 niños.
La policía estadounidense investiga las causas que habrían desatado el sangriento accionar del homicida, de apenas 20 años.
Además se supo que Lanza quiso comprar un rifle días antes de que se produzca el ataque, pero no lo logró porque se rehusó a someterse a una verificación de antecedentes y porque no estaba dispuesto a esperar el tiempo establecido para la compra de un arma.
Tampoco se descarta que Lanza sufriera de autismo, como lo ha declarado su hermano mayor Ryan Lanza a la policía. Asimismo, dijo a las autoridades que el muchacho tenía un historial de problemas mentales, pero su naturaleza no estaba clara.
En las investigaciones es clave el testimonio de una profesora herida en un pie, quien evoluciona favorablemente. Eso sí, la pesquisa en la zona del crimen durará un día más, como mínimo, según dijo el teniente Paul Vance de la policía estatal de Connecticut.
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