Bruno Leporatt, abogado del capitán Francesco Schettino, dijo que la integridad física de su cliente podía correr peligro y que por ello él decidió no asistir a la diligencia.
El capitán Francesco Schettino, quien permanece con arresto domiciliario y es acusado de homicidios múltiples por imprudencia y abandono de barco, no se presentó al juicio iniciado para hallar a los responsables del naufragio del crucero Costa Concordia ocurrido el 13 de enero pasado.
Su abogado, Bruno Leporatti, dijo -según citan agencias- que la integridad física de su cliente podía correr peligro y que por ello él decidió no asistir a la diligencia.
Pese a su ausencia, los fiscales acusaron a Schettino de causar el accidente al acercar la gigantesca nave, que transportaba más de 4.200 pasajeros y tripulación, demasiado cerca de la costa.
Asimismo, iniciaron investigación a otros ocho oficiales y directivos de Costa Cruceros, empresa propietaria de la siniestrada embarcación.
El Costa Concordia encalló frente a la isla de Giglio, en la costa de la Toscana (Italia), tras chocar con rocas el 13 de enero pasado, lo que causó la muerte de al menos a 25 personas. Siete están aún desaparecidas, y ocho de los cuerpos no han sido identificados.
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