El ciudadano oriental permanecerá en dicho centro penitenciario mientras dure el proceso que se le sigue por asesinar a su ex esposa, ex suegra y ex cuñado el domingo pasado.
El empresario chino Rong Yan Wu Tam, de 58 años, fue recluido en el penal de máxima seguridad Miguel Castro Castro tras asesinar el domingo pasado a su ex esposa, ex suegra y ex cuñado, y dejar en estado grave a la esposa de este último y su bebé de 7 meses.
El ciudadano oriental permanecerá en dicho centro penitenciario mientras dure el proceso que se le sigue por los delitos contra la vida y la salud, por homicidio calificado en agravio de sus parientes y tenencia ilegal de armas.
Como se recuerda, Wu Tam, disparó contra su ex esposa y ex suegra en uno de sus hoteles, ubicado en la cuadra uno de la avenida Eduardo de Habich, distrito de San Martín de Porres, y posteriormente atacó a su ex cuñado y la esposa de éste en su vivienda del centro de Lima.
Según dijo a la Policía, se enteró de que sus familiares estaban confabulados para querer acabar con su vida.
Acusó además al supuesto amante de su ex esposa, Lee Ken Ghon, de extorsionarlo con 50 mil dólares y ser integrante de la mafia del Dragón Rojo, la misma que coludida con sus parientes venían siguiéndole los pasos.
El ciudadano oriental permanecerá en dicho centro penitenciario mientras dure el proceso que se le sigue por los delitos contra la vida y la salud, por homicidio calificado en agravio de sus parientes y tenencia ilegal de armas.
Como se recuerda, Wu Tam, disparó contra su ex esposa y ex suegra en uno de sus hoteles, ubicado en la cuadra uno de la avenida Eduardo de Habich, distrito de San Martín de Porres, y posteriormente atacó a su ex cuñado y la esposa de éste en su vivienda del centro de Lima.
Según dijo a la Policía, se enteró de que sus familiares estaban confabulados para querer acabar con su vida.
Acusó además al supuesto amante de su ex esposa, Lee Ken Ghon, de extorsionarlo con 50 mil dólares y ser integrante de la mafia del Dragón Rojo, la misma que coludida con sus parientes venían siguiéndole los pasos.
Comparte esta noticia