Marisa Fernández, madre de familia que tuvo el infortunio de perder una extremidad en un atentado terroristas en los años 80, pidió una ejemplar sanción para que aquellos que utilizaron de forma negativa su nombre.
Una firma falsa y una supuesta huella digital de una mujer que perdió las manos en un atentado terrorista, así como las rúbrica de menores de edad y personas reportadas como fallecidas, habrían sido utilizados en los planillones para revocar al alcalde de Ate, Óscar Benavides, según un informe periodístico.
Marisa Fernández, madre de familia que tuvo el infortunio de perder una extremidad en un atentado terroristas en los años 80, pidió una ejemplar sanción para que aquellos que utilizaron de forma negativa su nombre.
El alcalde del citado distrito culpó de las irregularidades a su teniente alcalde Simón Ortiz, por lo que junto a otras 20 personas podría ser acusado de falsificación de firmas, delitos contra la fe pública y asociación ilícita para delinquir.
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