"En la noche era difícil de habitar porque se decía que se escuchaban cosas y se suponía que estaba embrujada", describió la fotógrafa Ángela Romero.
La identidad del cuerpo hallado en una casa abandona en el Cusco es de Ramón Castillo, conocido como “Antares de la Luz” y líder de una secta chilena acusada de incinerar a un bebé en Colliguay.
La vivienda, donde se encontró el cadáver, está ubicada en la calle Shapi 872 cerca a la Plaza de Armas de la ciudad histórica; el domicilio es también conocido entre la población y los turistas como la “casa embrujada”, nominación adoptada por estar envuelta en una historia de crimen pasional de antaño.
"En la noche era difícil de habitar porque se decía que se escuchaban cosas y se suponía que estaba embrujada", describió la fotógrafa Ángela Romero.
"La casa aún es un misterio y en la cultura popular de la sociedad cusqueña hay muchas historias sobre ella", añadió.
La versión más difundida que se conoce en Cusco manifiesta que allí ocurrió hace décadas un crimen pasional que involucró a un matrimonio.
La prensa local ha publicado notas en las que se aludía a historias sobre "fantasmas" que tenían el inmueble como escenario.
Sin embargo, el alcalde del Cusco, Luis Flores García, señaló que se ha previsto tapiar la abandonada edificación para que no use como lugar de reunión de drogadictos y delincuentes.
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