La eurozona celebró el sábado pasado una teleconferencia y logró acercar posturas sobre la fórmula más apropiada para financiar las necesidades de Atenas.
Los ministros de Finanzas de la eurozona tratarán hoy, en un tercer intento, acordar los términos del rescate griego con el fin de cerrar sus necesidades financieros de los próximos años y garantizar la sostenibilidad de la deuda griega.
La eurozona celebró el sábado una teleconferencia con el fin de avanzar los trabajos y logró acercar posturas sobre la fórmula más apropiada para financiar las necesidades de Atenas y hacer sostenible la deuda helena, según dijeron a Efe fuentes diplomáticas.
Esas fuentes explicaron que el acuerdo no será definitivo hasta el Eurogrupo del 3 y 4 de diciembre, dado que las decisiones que se tomen hoy aún tendrán que pasar por algunos parlamentos nacionales, como el alemán.
Los ministros de Finanzas acordaron en su teleconferencia una base para las negociaciones con el FMI que consistirá en reducir de nuevo los intereses que la eurozona cobra a Grecia por préstamos bilaterales y transferir a Grecia los beneficios que han sacado los bancos centrales nacionales y el BCE de los bonos griegos que tienen en su cartera desde 2010, de acuerdo con estas fuentes.
Para reducir la deuda griega, los ministros también acordaron que el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) compre deuda griega en el mercado secundario.
El miércoles pasado fuentes del grupo parlamentario de la jefa del Gobierno alemán, Angela Merkel, señalaron que la canciller comentó que un aumento de sus garantías en unos 10.000 millones de euros posibilitaría al FEEF permitiría llevar a cabo la recompra por parte de Atenas de parte de su deuda con un descuento.
La semana pasada también estaba en la combinación de medidas que pretende acordar la eurozona para ayudar a Grecia prolongar los vencimientos de los préstamos bilaterales.
Informe de la troika
Un informe de la troika determinó que Grecia necesitará una ayuda adicional de 15.000 millones de euros para cerrar el agujero fiscal hasta 2014 y 17.600 millones de euros de 2015 a 2016.
La sostenibilidad de la deuda griega es otro de los elementos claves del rescate, dado que Grecia debería inicialmente reducirla al 120 % de su PIB en 2020 si no se prolonga el calendario hasta al menos 2022, como defiende la eurozona.
El semanario alemán "Der Spiegel" afirmó el domingo en su edición digital que el BCE y el FMI abogan por una quita radical que permita rebajar la deuda griega del 144 % del PIB al 70 % hasta 2020 y para ello los acreedores públicos deberían aceptar pérdidas del 50 % sobre el monto que les debe Grecia, una opción que Alemania y otros países rechazan enérgicamente.
Pese a ello, las dos instituciones monetarias considerarían imprescindible la quita, afirma la revista alemana, que asegura que el lunes no habría una decisión sobre esta fórmula, en línea con lo que publicó el domingo el diario germano "Welt am Sonntag", que sitúa en 2015 una posible decisión al respecto y asegura que la eurozona abordó esta posibilidad el lunes en París en una reunión "secreta".
Además de las necesidades financieras de Grecia más allá de 2014, cuando se terminaba inicialmente el rescate, Atenas necesita cuanto antes el próximo tramo de ayuda de 31.500 millones de euros, que podría juntarse con otro desembolso totalizando así 44.000 millones.
EFE
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