Iniciativa fue impulsada por dos emprendedores de la Isla Gran Canaria y ya se ofrece a hoteles y tiendas gourmet.
Dos emprendedores canarios comenzarán a producir agua de niebla en septiembre próximo a 1.600 metros de altitud en Gran Canaria, un producto que venderán embotellado a hoteles y tiendas gourmet y que ofrecen para ayudar a combatir los incendios forestales, debido a que pueden almacenarse en los montes.
Los autores de esta iniciativa son el ingeniero técnico agrícola, especializado en captación de nieblas, Theo Hernando y su socio Ricardo Gil, investigador en energías renovables, finalista de la edición regional del Premio Emprendedor XXI, quienes han consolidado la empresa Aguas de Niebla de Canarias SL.
Ambos han patentado un prototipo de captadores de niebla, rocío y precipitaciones, en forma de prisma y fabricados con fibra de vidrio y estructura de aluminio, con los que esperan conformar el primer “huerto hídrico” con captadores tridimensionales del mundo.
Estos captadores son totalmente ecológicos, no generan impacto visual, ya que parecen pajareras, ni ocupan mucho espacio, y la actividad que desarrollan "no consume energía ni genera residuos", destacó Gil.
A ello se suma su privilegiada situación, en la confluencia de dos barrancos, lo que ayuda a canalizar los flujos de viento que se dirigen hacia la cumbre de la isla.
Por su parte, Hernando explicó que las mejores condiciones para captar agua de niebla se dan en un rango de vientos de entre 30 y 35 kilómetros por hora, ya que "a mayor cantidad de metros cúbicos de aire que pasa por el captador, más litros se recogen".
En un principio, estos emprendedores pensaron que su idea calaría entre las administraciones públicas de las Islas, ya que, a su juicio, capturar y almacenar agua cerca de las cumbres de Gran Canaria constituye un recurso forestal de primera magnitud, porque no habría que transportarla desde lugares lejanos, lo que agilizaría la extinción de incendios.
Sin embargo, la crisis económica ha hecho que este proyecto no pueda contar con la administración como principal cliente, por lo que sus promotores le han "dado la vuelta" y han apostado por vender el agua de los alisios, más presentes en Canarias en verano y en menor proporción en invierno, para crear un nuevo producto que dirigirán al sector turístico y también promocionarán en las tiendas de exquisiteces con el nombre de "Alisios Canary Fog Water".
Complemento dietético ideal
Según los promotores del agua de niebla, este recurso al no haber tocado roca carece de bicarbonatos, lo que la convierte en un complemento dietético ideal para niños y personas con problemas de riñón.
Los costos
Según Hernando, este proyecto se pondrá en marcha con una producción limitada de entre 40 mil y 60 mil litros de agua, que comercializarán en botellas de plástico de un litro y litro y medio que costarán un euro y unos 60 céntimos respectivamente.
Aguas de Niebla de Canarias SL, creada en 2011 y que ha invertido en esta iniciativa 150.000 euros que sus socios prevén recuperar en cuatro años, ha diseñado para sus botellas un logotipo que simboliza las curvas de presión con las que se muestran las ondas del anticiclón en los mapas atmosféricos.
Hernando ha destacado que, al no haber precedentes sobre esta actividad, su iniciativa se ha
dilatado en la tramitación de permisos sanitarios y medioambientales, ámbito en el que existían "muchos vacíos", ya que hasta ahora nadie se había planteado que del mar de niebla tan cotidiano en Canarias se puede obtener un recurso hídrico sostenible.
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