En medio de la oscuridad, algunas de sus compañeras empezaron a llorar y para abrigarse del frio comenzaron a abrazarse entre todos, contó Anthony de 18 años.
Los once estudiantes perdidos durante catorce horas en los cerros de las Lomas de Zapallal contaron su experiencia de cómo lograron superar el frio y la oscuridad de la noche cuando perdieron la noción de la ubicuidad.
Unos de los adolescentes identificado como Anthony, de 18 años, informó que subieron al cerro a eso de las cuatro de la tarde del miércoles 17 de diciembre; y se dieron cuenta que estaban perdidos a eso de las 9 de la noche. Entonces comenzaron a preocuparse al no encontrar el camino a casa.
"Lo primero que hicimos es ponernos de acuerdo para encontrar un camino de regreso y como no lo pudimos hacer, entonces buscamos un lugar donde dormir", contó a RPP Noticias.
En medio de la oscuridad, algunas de sus compañeras empezaron a llorar y para abrigarse del frio comenzaron a abrazarse entre todos ya que muchos estaban con shorts y otros sin casacas ni chompas.
Contó que la intención de ascender al cerro era encontrarse por última vez porque cursaban el último año del colegio. "Queríamos reunirnos, ya que acabamos la promoción. Entonces prendimos una fogata y comenzamos a conversar", dijo Anthony.
Otra joven, llamada Milagros, dijo que estaban preocupadas y nerviosas cuando se dieron cuenta que no sabían cómo iban a regresar a sus casas, donde sus padres los estaban esperando.
"Les dijimos a nuestros padres que íbamos ir al cerro, pero después no supimos cómo regresar".
Los padres iniciaron la búsqueda en horas de la madrugada al saber que los adolescentes no tenían la ropa adecuada y podían sufrir de un cuadro de hipotermia.
Según las autoridades, la temperatura en horas de la madrugada era de 16 grados, situación que se acentuaba con la presencia de neblina y una garúa persistente.
La Policía Nacional del Perú confirmó que los estudiantes se encuentran en buen estado.
Un oficial informo que es normal, o sucede con mucha frecuencia, que grupos de adolescentes toman viajes durante la noche sin importarles las frías condiciones ni los peligros.
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