Taylor fue declarado responsable de facilitar armas, a cambio de diamantes, a los rebeldes del Frente Revolucionario Unido de Sierra Leona.
El Tribunal Especial de Sierra Leona (TESL) declaró hoy culpable al ex presidente liberiano Charles Taylor de crímenes de guerra y lesa humanidad cometidos durante la guerra civil en Sierra Leona (1991 -2002), si bien la pena se decidirá posteriormente.
Los jueces consideraron que Taylor es "responsable" de los crímenes porque ayudó a las fuerzas rebeldes de Sierra Leona (RUF) con apoyo logístico, moral y de armas, pero rechazaron que tuviera responsabilidad de mando o formase parte de una "empresa criminal" en la que también estaban implicados los líderes rebeldes de Sierra Leona.
Sin embargo eso no significa que los jueces hayan aceptado en su totalidad la acusación de la fiscalía, ya que rechazaron la responsabilidad individual o de mando de Taylor, del que dijeron "no daba órdenes a los líderes rebeldes" de Sierra Leona.
El tribunal también rechazó que Taylor formase parte de una "empresa criminal" más amplia, en la que estaban implicados los líderes rebeldes sierraleoneses.
"El acusado aportaba una asistencia práctica al proveer armas, municiones, entrenamiento y apoyo moral y logístico, lo que tuvo un efecto sustancial sobre la comisión de los crímenes", indicó el juez que preside el caso, Richard Lussick, durante la lectura de la sentencia, pronunciada en La Haya.
Además, los magistrados constataron que Taylor recibió los llamados "diamantes de sangre" como pago de su apoyo al RUF: "hubo una continua entrega de diamantes por parte del RUF al acusado, a cambio de armas y municiones", indicó el juez Lussick.
La declaración de la modelo Naomi Campell en agosto de 2010, a quien el dictador habría regalado los supuestos "diamantes de sangre", fue determinante en la estrategia de la fiscalía para probar este hecho, ya que Taylor negó en todo momento haber tenido en sus manos las piedras preciosas.
Según los jueces, Taylor "sabía" que sus actos "asistían a la comisión de los crímenes", como mutilaciones de extremidades a civiles; violaciones de niñas y mujeres; campañas de terror; asesinatos y el alistamiento de niños menores de 15 años en las filas de los rebeldes o para trabajar en las minas de diamantes como esclavos.
"Muchas mutilaciones y violaciones de mujeres se cometían en público, y se llegó a quemar a gente viva en sus casas", subrayó el juez como ejemplos de las atrocidades cometidas en Sierra Leona.
EFE
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