Los obispos de la Conferencia Episcopal de Venezuela rechazaron este martes el empleo de la fuerza por parte de los organismos de seguridad del Estado.
Los obispos de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) rechazaron este martes el empleo de la fuerza por parte de los organismos de seguridad del Estado que, dicen, "se han extralimitado" al reprimir varias de las manifestaciones de los últimos días.
"Rechazamos rotundamente el empleo de la fuerza ejercida en algunas manifestaciones por parte de organismos de seguridad del Estado, que se han extralimitado y han producido consecuencias lamentables e irreparables", señaló la CEV en un comunicado en referencia a los sucesos que han dejado al menos 13 muertos.
Asimismo, el documento indicó que la Fiscalía "debe investigar estos casos y poner en manos de la justicia a miembros de estos organismos que hayan abusado de su autoridad" y recuerda que las autoridades policiales y militares "están obligadas a respetar los Derechos Humanos, ante todo el derecho a la vida".
La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, dijo el lunes que "se tiene mucha claridad de cómo ocurrieron los hechos" en los que se produjeron las tres muertes registradas en Caracas al final de una concentración opositora el pasado día 12 y que hay tres agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) detenidos por ello.
Los obispos indicaron, además, que oran "por los que han fallecido y por quienes han resultado heridos", que, según cifras oficiales, son unos 150.
Asimismo, pidieron que se busque "la verdad" de los hechos y sucesos de los últimos días "con el concurso de todos".
La CEV señaló, además, que la "Comisión de la Verdad" propuesta recientemente por el presidente, Nicolás Maduro, para investigar los hechos violentos de los últimos días "no es para favorecer a un sector en detrimento del otro, sino para buscar la verdad de acontecimientos dolorosos que han enlutado a familias venezolanas".
"Es necesario que Venezuela conozca a quienes han delinquido y paguen su condena, sea quien sea", enfatizaron los obispos.
Los jerarcas de la Iglesia católica también apuntaron que el pueblo tiene derecho a la protesta acorde a lo establecido en la Constitución, pero que no se puede aceptar que se torne violenta "como desafortunadamente se ha visto en algunos casos", se convierta en vandalismo o propicie la ocasión para actos delictivos por parte de grupos ajenos a la protesta.
"Comprobamos la indefensión de la ciudadanía ante la irrupción de grupos armados no policiales ni militares que han arremetido contra la población", expresó el escrito de la CEV, que también reclama que "grupos de esta naturaleza están al margen de la ley, no poseen autoridad alguna y atentan contra las bases de la convivencia".
En este punto, los obispos pidieron "que se actúe y se impida que sigan realizando sus fechorías, y se investigue seriamente su proceder, sea de la tendencia política que sea".
El documento de los prelados resaltó, asimismo, que se debe insistir en el diálogo entre todos los factores que componen la sociedad venezolana, en que haya respeto y reconocimiento de los que piensan diferente.
"Pedir diálogo y paz con un verbo encendido o incendiando la calle, no produce el efecto esperado", indicaron los obispos.
Venezuela ha sido escenario de protestas contra el Gobierno de Maduro desde hace ya catorce días, manifestaciones que en algunos casos se han tornado violentas y han dejado al menos trece muertos, 150 heridos y más de cuarenta detenidos.
EFE
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