Intervienen cinco hostales y un bar que funcionaban como prostíbulos

Cinco hostales y un bar que servían de fachada a prostíbulos clandestinos fueron intervenidos por agentes de la Municipalidad de Lima y del Escuadrón Verde de la Policía Nacional en el Cercado de la ciudad.

Los establecimientos en mención se encuentran en los jirones Dávalos, Lissón, Quilca y Zepita, donde se reunían las trabajadoras sexuales, algunas de ellas menores de edad. En el operativo, se detuvo a más de 30 prostitutas y a seis proxenetas.

Gabriel Prado, gerente de Seguridad Ciudadana del consejo metropolitano, aseguró que este tipo de acciones devolverá la tranquilidad a miles de ciudadanos que soportan la inseguridad que se genera alrededor de los hostales convertidos en prostíbulos.

“Muchas de las mujeres que hallamos en estos lugares son explotadas, sobre todo cuando se trata de de menores de edad y junto con la Policía Nacional son liberadas por lo que consideramos que este es una manera de contrarrestar la trata de personas”, informó.

Inspectores de la Gerencia de Fiscalización y Control y de la Subgerencia de Defensa Civil identificaron también que los locales no cumplen con medidas de seguridad adecuadas. En el momento de la intervención, no contaban con extinguidores de fuego ni señalización.

Además, presentaban cableado eléctrico inadecuado y enchufes al aire libre. Del mismo modo, se encontraron habitaciones sucias, malolientes y hasta colchones podridos, papeles higiénicos y preservativos usados regados por los pisos.

Los hostales de la cuadra 2 del jirón Dávalos Lissón y cuadra 4 del jirón Quilca han sido clausurados por 30 días.

Por el mismo período de tiempo se cerró un bar ubicado en la esquina de jirón Callao y Camaná cuyas instalaciones, luego de la inspección respectiva, fueron catalogadas como de alto riego.