Transportistas y comerciantes se habían atrincherado y quemado llantas para evitar la operación. Más de 200 agentes tuvieron que intervenir.
El terminal terrestre de Fiori ya no existe. Más de 200 de policías desalojaron este jueves por la madrugada el terreno donde funcionaba, luego de que unos 300 transportistas y comerciantes se atrincheraron en el lugar por la noche para evitar la operación. Luego de la intervención, según autorizó el Poder Judicial, el lugar fue demolido.
Según una resolución judicial, el terreno que estaba en posesión de la Asociación de Propietarios de la Urbanización Fiori y del Terminal Terrestre Fiori fue adjudicado a la Inmobiliaria Gerais, disposición a los que los transportistas y comerciantes se oponían. Por la noche, estos se atrincheraron en el lugar al grito de “Fiori no se vende”. Luego quemaron llantas en la auxiliar de la Panamericana Norte que da a la venida Alfredo Mendiola. Mientras reclamaban, un encapuchado apuntó con una pistola a un reportero de RPP Noticias que realizaba una entrevista.
Los comerciantes seguían atrincherados cuando a las 4 a.m. llegaron alrededor de 300 agentes del Batallón de Asaltos de la Policía y del Grupo Terna, quienes los dispersaron. Cuatro personas fueron intervenidas por resistirse a la autoridad. Alrededor de las 4:45 a.m. maquinaria pesada comenzó a demoler el lugar donde operaba el terminal, de unos 6 mil metros cuadrados.
Luego de la demolición, la policía rodeó el terreno e impidió el ingreso de peatones. Tampoco hay paso vehiculas por el lugar. El terminal de Fiori era un popular punto para tomar buses interprovinciales hacia el norte de Lima. Tras el desalojo, un grupo de los transportistas y comerciantes es desplazó a un calle paralela, Miguel Ángel, donde por la mañana habían entre cinco y seis buses esperando pasajeros para partir.
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