Un dirigente de los estudiantes dijo que se quedarán en el lugar a la espera de los resultados del debate en el Congreso.
La marcha contra la Ley Jóvenes se detuvo en la novena cuadra de la avenida Abancay, en el Centro de Lima, donde se instaló un fuerte cordón policial que impide el avance de los manifestantes.
En diálogo con RPP Noticias, uno de los dirigentes estudiantiles, identificado como Víctor Otoya, dijo que han decidido quedarse en el lugar a la espera de los resultados del debate en el Congreso.
“Teniendo una alta vocación democrática y, sobre todo, pacífica, hemos decidido asentarnos en la avenida Abancay y esperar el debate”, señaló, aunque admitió que el objetivo inicial era llegar a la sede del Legislativo.
El dirigente estudiantil señaló que si se consigue la derogatoria de la norma, su agenda cambiará, pero apuntó que sus manifestaciones continuarán, en el entendido de que la llamada Ley Pulpín “no es la única en contra del pueblo”.
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