Desmond Tuto lo lcalificó como un ´Ícono mundial de la reconciliación´ y su pueblo lo llama ´Mandiba´, Nelson Mandela es un ejemplo de los valores que todo líder debe enarbolar.
Nunca predicó ideas políticas ni religiosas. Nelson Mandela o "Madiba" simplemente, es uno de los líderes, cuyo nombre es asociado a los valores del perdón y la reconciliación, reflejada en su célebre frase: “El perdón libera el alma, hace desaparecer el miedo. Por eso el perdón es un arma tan potente, que en la voz de un hombre que purgó una condena injusta de 27 años por luchar contra el racismo, adquiere una dimensión de grandeza.
Nelson Mandela obtuvo el premio Nobel de la Paz en 1993 y se convirtió en uno de los líderes más populares del siglo XX y su figura es venerada dentro y fuera del país sudafricano, no solo por haber terminado con el régimen racista del apartheid, sino también por evitar la venganza contra la minoría blanca, que le mantuvo en prisión durante 27 años. Por ello, Desmond Tuto, otro de los grandes líderes que lucharon contra el apartheid lo calificó como un “icono mundial de la reconciliación”.
ROLIHLAHALA "EL QUE TRAE PROBLEMAS"
Los valores de Nelson Mandela fueron alimentados por la cultura de su pueblo, los xhosas. Se sabe que de joven, Madiba gustaba del deporte y llegó a ser boxeador amateur; gustaba de vestir elegantemente y tenía fama de seductor.
Natural del pequeño pueblo de Mvezo, en la región de Transkei (sureste) dentro del clan real de los Thembu de la etnia xhosa, el verdadero nombre de Mandela es Rolihlahla, que significa “el que trae problemas”, pero en la escuela su maestra lo bautizó como Nelson.
Fue expulsado de la universidad de Fort Hare por un conflicto con la dirección y a los 22 años, huyó de su hogar para no casarse contra su voluntad. A su llegada a Johannesburgo, una gigantesca metrópolis minera, Mandela toma conciencia de la segregación que dividía su país y cambiaría su destino.
SUS AMORES Y SU LUCHA
Conocer a Walter Sisulu en Johannesburgo determinó su participación en la vida política: Le abrió las puertas del Congreso Nacional Africano, el partido de la mayoría negra; su militancia lo alejó de su primera esposa Evelyn y le hizo conocer a Winnie, una enfermera de 21 años.
Junto a Oliver Tambo y otros jóvenes líderes se embarcaron en la lucha contra un gobierno que había impuesto en 1948 el apartheid o segregación de las razas; sus campañas de movilización no violenta inspiradas en los métodos de Gandhi, fue motivo de represalias, el partido fue declarado ilegal en 1960 e hizo que Mandela pasara a la clandestinidad, desde reorientó su lucha por el levantamiento en armas.
En 1964 fue capturado y llevado a la isla-prisión de Robben Island, frente a las costas de Ciudad del Cabo, donde pasó 27 años sin albergar odios ni venganza por sus opresores.
“Sabía perfectamente que el opresor tiene que ser liberado, igual que el oprimido. Un hombre que priva a otro hombre de su libertad es prisionero de su odio, está encerrado detrás de los barrotes de sus prejuicios”, explica Mandela de sus años de prisión.
Fue liberado en 1990 y participa de la organización de elecciones universales y democráticas en su país. Tras su elección triunfal como presidente en 1994, será un predicador incansable de la reconciliación de las razas.
Si bien su actividad política y sus años en prisión no le permitieron gozar de la plenitud familiar, Mandela tuvo varios idilios y tres matrimonios: Con Evelyn, su primera mujer, tuvo dos niñas y dos niños, con Winnie tuvo dos. En total tiene ahora 17 nietos y 12 bisnietos. Tras divorciarse de Winnie, se casó por tercera vez en 1998, a los 80 años, con Graça Machel.
Su última aparición pública fue conmovedora y arrancó más de una lágrima, cuando apareció saludando a la multitud en la final del Mundial de Fútbol en 2010 en Sudáfrica. Su sola presencia era un tributo al perdón y la reconciliación
Fuente: AFP
-------------------------------------------
MÁS ALLÁ DE LAS CANAS es un programa que se trasmite por RPP Noticias los sábados desde las 7:00 pm con la conducción de Miguel Humberto Aguirre.
Comparte esta noticia