Piden liberación de emerretista chileno encarcelado en el Perú

Una treintena de familiares y amigos del chileno Jaime Castillo Petruzzi, preso en Perú durante 21 años por motivos políticos, junto a dirigentes de derechos humanos, entregaron este lunes una carta a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, para pedir la liberación del guerrillero vinculado al MRTA.

"Esperamos que esta sea la última gestión que hagamos porque ya llevamos 21 años haciendo gestiones con todos los niveles, con todos los gobiernos y visitando constantemente a mi hijo en Perú", expresó Jaime Castillo Navarrete, padre del preso chileno.

Castillo Petruzzi, de 59 años, fue un revolucionario miembro del Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR) y del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA), condenado en Perú en 1994 por "traición a la patria", que ahora se podría beneficiar del tratado bilateral sobre traslado de personas condenadas, suscrito por Chile y Perú en 2012.

Según el padre, el traslado de Castillo a Chile está autorizado tanto por el Ministerio de Relaciones Exteriores como por el Ministerio de Justicia chileno, pero está "tropezando con la tramitación del Gobierno peruano", motivo por el que piden la intervención del Gobierno de Chile.

"El traslado de Jaime tiene que ser aprobado por el consejo de ministros peruanos y tiene que tener el visto bueno del mandatario Ollanta Humala, cosa que no sucede porque el presidente peruano tiene una débil apreciación política y un movimiento de esta categoría contribuiría a crearle problemas", sostuvo Castillo Navarrete.

Dirigentes de derechos humanos y parlamentarios acompañaron a los familiares y amigos del encarcelado en la entrega de la carta.

Después de algunos intercambios de palabras con los carabineros, que durante media hora impidieron la entrada de la comitiva a La Moneda, sede del Ejecutivo chileno, el padre y la hermana de Jaime Castillo junto al parlamentario Sergio Aguiló entraron al recinto para hacer efectiva la entrega de la carta.

El parlamentario Sergio Aguiló, subrayó su voluntad de que con esta acción, "la presidenta de la República de Chile haga valer el convenio chileno-peruano para el intercambio de presos de nacionalidades cruzadas y podamos tener a Jaime Castillo en Chile en las próximas semanas".

Juzgado en 1994 por un tribunal militar sin rostro y sin derecho a la defensa, Castillo fue condenado en Perú a presidio perpetuo bajo el cargo de "traición a la patria".

No obstante, en 2003 fue condenado a 23 años de cárcel por "terrorismo contra el Estado peruano", supuesto delito que se habría configurado por su vinculación política con el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA).

Convertido en uno de los presos políticos más antiguos de América Latina, Castillo estuvo muy cerca de la libertad en 2010 cuando se le estuvo a punto de reconocer su derecho a beneficios penitenciarios, sin embargo, meses antes de solicitar el derecho, el Gobierno peruano dejó esa ley sin efecto, por lo que el también militante del MIR saldría libre el 14 de octubre de 2016.

EFE