El toque de queda, anunciado al borde de la medianoche, ha sorprendido a muchos; que han salido a laborar, pero se han encontrado con la medida y ausencia de transporte público.
Decenas de personas se encuentran en los principales paraderos de Lima esperando por un bus que los lleve a sus centros de trabajo, constató un equipo de RPP Noticias en un recorrido por la ciudad.
El toque de queda, anunciado al borde de la medianoche, ha sorprendido a muchos; que han salido a laborar como cualquier día, pero se han encontrado con la medida y la consecuente ausencia de transporte público.
“No hay carro. Estoy más de una hora esperando”, comentó un señor, quien dijo haberse enterado de la inmovilización social obligatoria hoy al despertar.
En el paradero Puente Nuevo, en el límite de El Agustino y San Juan de Lurigancho (SJL), se registró una notoria aglomeración de personas, ya que muchos llegaron desde otros puntos con la esperanza de encontrar transporte público.
Ante este panorama, buses de la Policía Nacional comenzaron a trasladar a pasajeros, a fin de aligerar la carga de personas. Sin embargo, muchos se han quedado esperando por un bus que los lleve a sus destinos.
Molestia e indignación
Los pasajeros varados se mostraron indignados por el abrupto anuncio del toque de queda, ya que no han tenido la posibilidad de coordinar con sus empleadores.
Una señora dijo que ella labora al día a día en el rubro de limpieza, por lo que si no acude a laborar hoy no recibe su paga. “Tengo dos hijas que alimentar”, manifestó visiblemente molesta.
Algunos vehículos particulares, como station wagon, han salido a realizar transporte informal; pero solo realizan pequeños viajes entre ciertos puntos. Pese a ello, muchas personas han optado por movilizarse en ellos, a fin de acercarse a sus destinos.
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Buses de la Policía trasladan a decenas de pasajeros varados
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