Alejo Garza murió a manos de sicarios tras atrincherarse en su propiedad, pese a que un cártel le dio 24 horas para que lo abandonara.
A diferencia de Alejo Garza, quien murió al defender su rancho del crimen organizado, se calcula que hay miles de explotaciones abandonadas en el estado mexicano de Tamaulipas por el miedo de sus propietarios, que no quieren acabar como el ya famoso empresario considerado por muchos como un héroe.
Garza, de 77 años, se negó a entregar su rancho a uno de los cárteles -que le dio 24 horas para que lo abandonara- y se atrincheró él solo hasta la llegada de una treintena de sicarios, de los que mató a cuatro e hirió gravemente a dos antes de ser asesinado.
Un funcionario de la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas que pidió el anonimato reveló a Efe que los cárteles de las drogas que sostienen enfrentamientos desde principios de año se apoderan de las propiedades para instalar en esos lugares sus centros de operación.
"Tanto los pueden utilizar como centro de reclutamiento o para resguardarse utilizando en la mayoría de los casos las bodegas que tienen los ranchos para evitar ser descubiertos por las fuerzas federales cuando hacen reconocimientos aéreos", añadió.
Puso como ejemplo el caso de un rancho ubicado en el municipio fronterizo de Mier, donde recientemente murieron abatidos por las fuerzas federales una veintena de sicarios y recordó la muerte de los 72 inmigrantes centroamericanos que fueron asesinados en una bodega ubicada en una finca cercana al municipio de San Fernando.
Según una fuente de la Unión Ganadera Regional de Tamaulipas (URGT), muchos ganaderos han optado por abandonar sus propiedades o cambiar de actividad para evitar ser víctimas de la delincuencia organizada.
"Es un flagelo que a todo mundo está golpeando; los ganaderos han dejado de ir a los ranchos y se dedican a otra cosa y por tanto la actividad ha venido para abajo. Están abandonando los ranchos", dijo a la prensa el dirigente de los ganaderos Alejandro Gil, que cree que las propiedades abandonadas podrían ser unas cinco mil.
Esta situación ha provocado pérdidas económicas al sector ya que, por ejemplo, han disminuido sensiblemente las exportaciones de becerros a los Estados Unidos.
Este dirigente explicó que las 200.000 cabezas de ganado que se habían logrado exportar durante 2009 se han reducido este año a una tercera parte.
"Un becerro allá vale 5.000 pesos (unos 400 dólares), y si dejas de exportar tantos miles de cabezas, las pérdidas son fuertes", lamentó.
Actualmente, en Tamaulipas se vive una guerra entre el Cártel del Golfo y su antiguo brazo armado, el Grupo de los Zetas, quienes pelean el territorio con enfrentamientos armados que han dejado centenares de muertos.
Uno de los casos que más repercusión ha tenido en los últimos meses ha sido el asesinato del empresario maderero Alejo Garza, que ha invadido redes sociales como Twitter o Facebook y ha generado una ola de adhesiones por la actitud valiente con la que se enfrentó a los sicarios que pretendían arrebatarle su propiedad. EFE
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