Rápidos y Furiosos 6, una aventura sobre ruedas con mucho por entregar

Hace doce años, una pequeña película llamada “The fast and the furious”, acerca del submundo de las carreras callejeras subterráneas en el lado este de Los Ángeles, se convirtió en un éxito de taquilla sorpresivo ese verano y recaudó 207 millones de dólares en la taquilla internacional.

Ahora que la serie ha acumulado unos sorprendentes $1,5 mil millones en las cinco películas, el anticipo para la edición del verano de 2013, ha alcanzado un punto culminante entre el público. En las plataformas de los medios sociales, el seguimiento de los fanáticos respecto de las películas y el elenco ha crecido hasta ser el mayor de cualquier franquicia activa. 

Si bien el viaje ha sido extraordinario, incluso a medida que la escala de las películas se ha tornado más ambiciosa, no se ha perdido de vista a sus personajes principales. Las escenas de riesgo se han vuelto más grandes y las locaciones más exóticas, pero la clave para el éxito continuo ha sido darle al público un motivo para conectarse y preocuparse. 

Ahora, Vin Diesel, Paul Walker y Dwayne Johnson lideran el elenco estelar mientras la saga, éxito de taquilla mundial basado en la velocidad, corre hacia su próxima entrega, “Fast & furious 6”.

Reunidos para su aventura más peligrosa hasta el momento, los favoritos de los fanáticos Michelle Rodríguez, Jordana Brewster, Tyrese Gibson, Ludacriz, Sung Kang, John Ortiz, Gal Gadot y Elsa Pataki son acompañados por los nuevos rudos de la serie Luke Evans y Gina Carano.

Desde que el golpe de Río de Dom (Diesel) y Brian (Walker), derribaron el imperio de un narcotraficante y le dejaron a su equipo 100 millones de dólares, nuestros héroes se han dispersado por el mundo. Pero su incapacidad de regresar a casa y ser obligados a vivir para siempre como fugitivos ha hecho que sus vidas resulten incompletas.

Mientras tanto, Hobbs (Johnson) ha estado siguiendo a una organización de conductores mercenarios de letal habilidad por 12 países, cuyo cerebro (Evans) es ayudado por un despiadado segundo a cargo que resulta ser el amor que Dom creía muerta, Letty (Rodríguez).  La única forma de detener al equipo criminal es superarlos en las calles, así que Hobbs le pide a Dom que reúna a su equipo de élite en Londres.  ¿El pago?  El perdón total para todos ellos para que puedan regresar a casa y tener a sus familias completas nuevamente.