En la localidad de Varzagan, una de las más dañadas, explotó un gasoducto debido a los sismos, aunque no se ha precisado si este suceso causó víctimas.
Entre 40 y 50 personas han muerto a consecuencia de los dos fuertes terremotos consecutivos de 6,2 y 6 grados de magnitud en la escala abierta de Richter que sacudieron hoy el noroeste de Irán, informó la agencia local ISNA, que citó una fuente del Ministerio de Salud.
Golam Reza Masumi, director de Emergencias Médicas del Ministerio de Salud, dijo a la agencia que los fallecidos a consecuencia de los sismos son al menos 40, aunque podrían ascender a 50, y los heridos se elevan a unos 400, de los que los más graves han sido trasladados a hospitales de las ciudades de Tabriz y Ardebil.
Los distritos afectados por los temblores son los de Ahar, Varzagan, Mehraban y Haris.
En la localidad de Varzagan, una de las más dañadas, explotó un gasoducto debido a los terremotos, según ISNA, aunque no se ha precisado si este suceso causó víctimas.
Por su parte, las autoridades locales indicaron que ya se han enviado equipos y material de rescate al área de los seísmos, unos 60 kilómetros al noreste de la ciudad de Tabriz, la capital de la provincia iraní de Azerbaiyán Oriental, fronteriza con Azerbaiyán y Armenia.
Desde Tabriz, la ruta directa a Varzagan ha quedado cortada y los equipos de rescate han tenido que utilizar caminos alternativos, mientras al menos cuatro poblaciones de la zona se encuentran totalmente incomunicadas debido a los temblores.
Entre los equipos que han acudido para socorrer a las víctimas hay perros entrenados en la localización de personas atrapadas.
Según el Centro Sismológico de Irán, el primero de los seísmos tuvo lugar a las 12.23 GMT y se sintió con fuerza en la ciudad de Ahar, mientras el segundo, ocurrido a las 12.34 GMT, sacudió la población de Varzagan, ambas en la provincia iraní de Azerbaiyán Oriental, a unos 38,4 grados de latitud norte y 46,7 grados de longitud este.
La mayor parte del territorio de Irán, incluida Teherán, una ciudad de 14 millones de habitantes, se encuentra en una zona de constantes movimientos telúricos, que han ocasionada decenas de miles de muertos en las últimas décadas.
En diciembre de 2003, un terremoto de 6,2 grados en la escala de Richter causó más de 30.000 víctimas mortales y al menos 50.000 heridos en la ciudad de Bam, en el sureste de Irán, y destruyó la antigua ciudadela del lugar.
El seísmo más letal de las últimas décadas en Irán se produjo en junio de 1990 en el noroeste del país, en las provincias de Gilan y Zanjan, con al menos 37.000 muertos y más de 100.000 heridos.
EFE
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