Rodolfo Orellana y su hermana Ludith se negaron a declarar durante la audiencia en la Segunda Sala Penal para Reos en Cárcel en el penal de Piedras Gordas, en Ancón.
“Quien pierde más con el silencio es el propio Rodolfo Orellana”, dijo Vicente Zeballos, presidente de la comisión parlamentaria que investiga a la organización del abogado.
Rodolfo Orellana y su hermana Ludith se negaron a declarar por los cargos de lavado de activos y asociación ilícita, durante la audiencia realizada en la Segunda Sala Penal para Reos en Cárcel en el penal de Piedras Gordas, en Ancón.
Los acusados adujeron que no lo hicieron debido a que, paralelamente, enfrentan un juicio por los mismos delitos.
Ante esta situación, Zeballos, se mostró sorprendido porque una persona, según su consideración, sí puede ser investigada por el Poder Judicial y el Ministerio Público.
"Quien pierde más con esta situación es el acusado (Rodolfo Orellana) porque pierde la oportunidad para esclarecer los hechos y para deslindar el grado de responsabilidad que pudiera tener y, obviamente, (con esta actitud) genera mayor incertidumbre”, concluyó Zeballos.