Shadya y Shandell nacidas en el hospital Guillermo Almenara el pasado 26 de febrero se encuentran estables y en perfecto estado de salud.
Con éxito fueron separadas las siamesas Shadya y Shandell nacidas en el hospital Guillermo Almenara el pasado 26 de febrero, informó hoy la presidenta ejecutiva de EsSalud, Virginia Baffigo.
Las pequeñas, quienes se encuentran estables y en perfecto estado de salud, nacieron unidas por el abdomen compartiendo el hígado, pero no las vías biliares ni el sistema vascular, por lo que fue posible su separación.
Baffigo indicó que el hospital Almenara cuenta con profesionales altamente especializados en cirugía pediátrica, cirugía de hígado y vías biliares, quienes asumieron el caso y resolvieron este problema congénito.
“Lograr la separación de las gemelas fue un gran reto y lo logramos, es un desafío inmenso para la ciencia médica peruana, en especial para nuestros neonatólogos y cirujanos pediatras, por ello felicito a los doctores Jorge Noé Bracamonte, Víctor Hugo Torres y Eduardo Anchante.”, expresó.
Explicó que Shandell actualmente pesa 4.450 Kg. y Shadya, 4.690Kg, ambas se recuperan en el área de Cirugía Pediátrica, y en los próximos días los padres de las menores, Orfelinda Vásquez Sánchez y Segundo Vargas Fuentes podrán llevarlas a casa.
La operación se inició a las 06.00 horas del miércoles 24 de abril con el proceso anestésico a cargo de médicos de la especialidad que realizaron su labor sin contratiempos; tres horas y media después, los galenos del servicio de Cirugía Pediátrica ejecutaron la apertura de piel y cavidad abdominal para facilitar la separación de los cuerpos y órganos de las niñas.
Acto seguido, los cirujanos del servicio de Cirugía de Hígado y Vías biliares del Departamento de Cirugía General procedieron a separar a las siamesas y dividir los hígados, utilizando para ello un ecógrafo de alta resolución que permitió delimitar el área hepática a seccionar.
Una vez separado los hígados, el equipo de cirugía pediátrica intervino nuevamente para terminar con el proceso, siendo la parte compleja la separación de los diafragmas -ambos corazones se veían muy juntos- lo que hizo necesaria una incisión muy cuidadosa y meticulosa, por parte del equipo multidisciplinario.
Luego los especialistas cerraron la cavidad abdominal y la piel de ambas, sin la necesidad de utilizar mallas quirúrgicas o injertos. Solo aplicaron técnicas especiales que permitieron alargar y extender la pared del abdomen, sin comprometer la presión interna del mismo.
Shadya y Shandell podrán desarrollar una vida normal. Ahora, cada una cuenta con un hígado, que se irá regenerando, sin afectar su buen funcionamiento, pero que requerirá controles periódicos, según precisaron los especialistas.
Cerca de unas 30 personas, entre médicos cirujanos de hígado y vías biliares, cirujanos de tórax, cirujanos pediatras, anestesiólogos, pediatras, radiólogos, enfermeras y técnicos asistenciales, participaron del proceso quirúrgico que culminó en dos quirófanos, totalmente equipados para llevar a cabo esta exitosa intervención quirúrgica.
La atención post quirúrgica estuvo a cargo de otro grupo de médicos especialistas en cuidados intensivos lo que permitió que las niñas tengan una óptima recuperación.
Los casos de siameses se presentan en una proporción de uno por cada 50 mil nacimientos, y uno de cada 600 casos de gemelos. Sólo el 50% de los siameses nacen vivos, y tan sólo el 20% de aquellos que nacen vivos sobreviven el tiempo suficiente como para considerar una operación de separación.
Andina
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