Si Julio Sal y Rosas no se presenta este jueves y el sábado en la Comisaría del Rímac, la Fiscalía podría determinar su detención preliminar.
Julio Sal y Rosas (30), el sujeto que quemó a su conviviente Elizabeth Alanya con agua hirviendo, no se presentó esta mañana a la citación que le hizo la Policía de la comisaría del Rímac.
La Policía esperará al sujeto el día de mañana jueves y el sábado 07 para que rinda su manifestación por la brutal agresión que le propinó a su pareja.
De no acudir a estos llamados, la Policía hará una acta de inconcurrencia o un atestado como no habido, que lo remitirá a la Fiscalía, donde se podría ordenar la detención preliminar de Sal y Rosas.
Familiares del agresor dicen que no se escapará de la justicia. Incluso, afirman que Julio Sal y Rosas está muy arrepentido por que hizo y que, por recomendación de su madre, no huirá.
En tanto, el magistrado Zoilo Enríquez reiteró en diálogo con RPP que jamás dispuso la liberación de Julio Sal y Rosas, porque éste no tenía la condición legal de detenido.
"Lo sustancial en un hecho de lesiones es el certificado médico legal y la conclusión que acompañaba este expediente que solicitaba la detención preliminar de esta persona decía que si no tenían el informe médico detallado del hospital no podían pronunciarse los médicos legistas", comentó.
"No solo actué conforme a ley, sino conforme a la Constitución. Hay que respetar los derechos fundamentales y todo lo que corresponde a un estado de derecho", agregó.
La Policía esperará al sujeto el día de mañana jueves y el sábado 07 para que rinda su manifestación por la brutal agresión que le propinó a su pareja.
De no acudir a estos llamados, la Policía hará una acta de inconcurrencia o un atestado como no habido, que lo remitirá a la Fiscalía, donde se podría ordenar la detención preliminar de Sal y Rosas.
Familiares del agresor dicen que no se escapará de la justicia. Incluso, afirman que Julio Sal y Rosas está muy arrepentido por que hizo y que, por recomendación de su madre, no huirá.
En tanto, el magistrado Zoilo Enríquez reiteró en diálogo con RPP que jamás dispuso la liberación de Julio Sal y Rosas, porque éste no tenía la condición legal de detenido.
"Lo sustancial en un hecho de lesiones es el certificado médico legal y la conclusión que acompañaba este expediente que solicitaba la detención preliminar de esta persona decía que si no tenían el informe médico detallado del hospital no podían pronunciarse los médicos legistas", comentó.
"No solo actué conforme a ley, sino conforme a la Constitución. Hay que respetar los derechos fundamentales y todo lo que corresponde a un estado de derecho", agregó.
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