El martes dos personas encontraron a un joven con discapacidad intelectual en Magdalena. Denunciaron falta de apoyo de las autoridades y no lo dejaron solo hasta reunirlo el miércoles con su familiar.
Al mediodía del martes, Nirvana Díaz y una acompañante caminaban por Magdalena cuando encontraron a un hombre desnudo tirado en la vereda. Manipulaba cáscaras de fruta y por ratos golpeaba el asfalto como quien toca una puerta. Buscaron darle ayuda e internarlo en alguna institución, pero en el hospital Víctor Larco Herrera les indicaron que no era posible. Luego de contactarse con el Rotafono de RPP Noticias y con la ayuda de la Policía, la persona fue identificada y reunida con su padre, quien contó que su hijo llevaba meses perdido.
“Estaba totalmente desnudo, desprotegido. Recurrimos a la Policía para que lo apoyase y en lugar de hacerlo se estuvieron burlando y botándolo como si fuese un perrito”, dijo Nirvana Díaz sobre el joven al que encontró en La Rotativa del Aire de RPP. “Estaba un policía por ahí rotando. Le pasamos la voz para que haga algo, al verlo no hicieron nada”.
Sin la ayuda del policía, contó Díaz, lo siguieron hasta el límite con San Miguel. Allí llamaron a la Policía y los Bomberos, quienes lo llevaron a la comisaría del distrito. “Hicieron un documento supuestamente para poder enviarlo al Larco Herrera. Por los síntomas que veíamos nosotros era un problema de salud mental”.
En el Víctor Larco Herrera, hospital psiquiátrico al que llegaron a las 3:00 p.m., no tuvieron mejor suerte. “Nos dijeron que no eran responsables de esos casos, que ellos ven cosas psiquiátricas y que a esa persona lo único que tenían que hacer era bañarlo y meterlo a dormir a su cama".
No fue internado
El doctor Carlos Palacios, director adjunto del Víctor Larco Herrera, señaló en RPP que "a las 3:00 p.m. lo trajeron por primera vez las señoritas y la Policía de San Miguel. Fueron atendidos inmediatamente, aunque inmediatamente fue catalogado que no estaba en emergencia. Se tenía una condición social que ponía en riesgo una discapacidad cognitiva, eso ni siquiera es una enfermedad. Hay que ponerle el nombre correcto a las cosas. No se puede tratar como un enfermo a una persona que nace con una condición diferente".
Nirvana y su acompañante, apoyadas por un patrullero de la comisaría de San Miguel, llevaron al hombre al hospital Santa Rosa de Pueblo Libre, donde, según cuenta, lo internaron y le dijeron que era un paciente psiquiátrico que requería ser internado en el Larco Herrera. “Con ese documento hemos ido en la noche. Dos amigos nos han ayudado en redes sociales para ver si alguien lo conoce, y hemos tenido el mismo trato”, contó.
Lima
Nirvana Díaz contó todo lo que hizo para darle ayuda al joven que encontró.
"Se les orientó a decirles que no es una emergencia, que el retardo mental necesita rehabilitación y cuidado, pero no es una enfermedad (...) que necesitaban una evaluación general médica. Nosotros fuimos los de la idea de usar el centro de salud de Magdalena o un hospital", declaró Palacios, quien también indicó que contactaron a las jóvenes con la Defensoría "para que las ayudaran a atender el caso, y en ese momento se han retirado".
Las jóvenes indicaron que se fueron para alimentarse, pero en el hospital lo consideraron un abandono del paciente. Finalmente, todavía con el hombre, dejaron el hospital por la madrugada. Uno de sus amigos, que lo apoyaba en la búsqueda a través de redes sociales, se contactó con el Rotafono de RPP, que hizo público el caso a través de La Rotativa del Aire.
De vuelta a casa
“No teníamos a dónde ir y no podíamos dar con INABIF. En el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables tampoco nos atendieron, hemos estado en la calle prácticamente. No sabíamos a quién recurrir”, contó Díaz.
Las jóvenes y el hombre fueron a la comisaría de Magdalena a esperar que amanezca con el objetivo de identificarlo "para poder sacarle un seguro del SIS para que le hagan un tratamiento, poder internarlo, hacer algo”, concluyó.
Por la mañana se identificó al joven como Giampier Chinchay Aspíllaga, de 22 años. La Policía ubicó en Chorrillos a su padre, Marcos Antonio Chinchay Recoba, y los reunió.
El señor, quien dijo tener otro hijo con la misma discapacidad que está desaparecido desde agosto del 2016, contó a RPP que no veía a Giampier hace meses. "Constantemente se escapa, no hay cómo retenerlo, mi casa es de material precario, siempre se sale". La última vez que lo vio fue "el 20 de diciembre, cuando mi esposa falleció".
En octubre presentó una denuncia por una desaparición previa y lo encontró, pero se volvió a escapar. "Ya no quieren recibir la denuncia, ya son varias veces que se escapa, por lo menos desde el 2011".
Sobre su hijo, dijo que "nació con retardo mental (discapacidad intelectual) y no habla. Estuvo con medicación últimamente, pero como se fue...tenía una cita en el Larco Herrera, pero no se pudo concretar". El padre contó que una vez, un empresario lo encontró y también lo llevó a este hospital, al que fueron a recogerlo al día siguiente y donde lo vio un psiquiatra y le recetaron medicinas. Sin embargo, también le dijeron que no podían internarlo.
"Pido [a las autoridades] que me apoyen para encontrar un albergue para que lleve una mejor vida. Él se me va a seguir escapando", dijo el señor que se dedica a vender medias en el mercado Sarita Colonia de Chorrillos. "Quisiera que me apoyen para que él lleve una mejor vida, para que lo puedan ver. Ya no hay quién lo vea, la mamá estaba enfermita y no podía verlo. Yo tengo que trabajar y él no se puede quedar solo en casa, si se queda se vuelve a escapar. Está en peligro su integridad física, le puede pasar algo en la calle".
Lima
Respuesta del director adjunto del Larco Herrera.
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