Las autoridades investigan si estas personas tuvieron un pasado oscuro, como alguna relación con el nazismo. Los resultados de las pesquisas se conocerán en junio.
Viena intenta esclarecer el pasado de las personas que dan nombre a unas 4.100 de sus calles, en un paso más en su esfuerzo por hacer memoria histórica en la capital austríaca, especialmente de sus capítulos más negros.
Los resultados del estudio, encargado hace dos años a una comisión de historiadores encabezada por el catedrático Oliver Rothkolb, se harán públicos en junio.
Después, las autoridades deberán decidir si cambian los nombres de algunas calles, explicaron a Efe fuentes del Ayuntamiento de Viena.
En la capital austríaca hay unas 6.500 calles, de las cuales 4.100 llevan el nombre de personas, y la vida de estas es objeto de la investigación en la que los historiadores deben buscar posibles elementos conflictivos de su pasado.
En declaraciones a Efe, Rathkolb adelantó que los miembros de su equipo diferenciaron tres grupos de personas con un pasado cuestionable en diversos grados.
En el primero están aquellos cuya "biografía real" resultó, a la luz del nuevo material encontrado en los archivos, muy divergente de la "biografía conocida", y reveló que estuvieron más comprometidos con el régimen nazi de lo que se pensaba.
En un segundo grupo se aglutinan las personas cuyo estudio "trajo sorpresas, pero no tan extremas", según Rathkolb.
Y por último están aquellas que solo revelaron "pequeños episodios biográficos" que puedan ser cuestionables, precisó el historiador, catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Viena.
De todas formas, desveló que no se conocen nombres de autores de crímenes de lesa humanidad o de guerra.
El historiador reconoció que el grueso de los nombres conflictivos -que incluyen también los de plazas y parques- está relacionado con el nazismo, que gobernó Austria entre 1938 y 1945.
EFE
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