La última etapa del especial de Iquique en la Pampa del Tamarugal era una fiesta, pero pudo mancharse por dos camionetas que no respetaron la ruta del Dakar.
Robby Gordon pasó hecho una bala. Sin frenar bajó los mil metros empinados camino al ‘Vivac’ de Iquique para terminar primero en la etapa. Todo era una fiesta, la gente vibraba con cada piloto que pasaba y los apoyaban a bajar rápidamente. El asado y la cerveza eran el menú servido en la arena y debo reconocer que con tanto calor envidiaba sus refrescantes posiciones.
Además, la ruta estaba dibujada para los asistentes con miradores excepcionales, con lomas al borde de la pista para apreciar en primera fila los derrapes, aunque todos esperaban a los camiones. “Ahí está un camión, un camión” gritaban al ver al italiano Biasion con su Iveco verde. Los asistentes estaban satisfechos.
Sin embargo, la fiesta pudo verse empañada cuando una Hummer H2 subió en contra por una loma empinada y una moto se acercaba a velocidad para terminar su especial, la gente gritaba que tenga cuidado y el piloto alertado pudo salir por un costado y continuar con su camino, no sin antes parar y voltear a verlo.
La segunda ocasión de peligro se vivió con una camioneta que venía detrás de una cuatrimoto y una moto que pugnaban por sobrepasarse para no comer el polvo del otro. Las personas le gritaban de todo al chofer de la camioneta que al final optó por virar a la derecha para salir de la ruta.
En Perú debemos tener bastante cuidado, actuar con prudencia para no generar accidentes que lamentar. Hagamos del Dakar la fiesta que es y disfrutemos del espectáculo de los autos con el pie afondo, de las motos y de los camiones y todo su poder en las pistas. Nos vemos en Lima
Por Oscar Moral
Enviado especial al Rally Dakar 2012
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