La atleta nacional no dijo nada respecto a una agresión del entrenador coreano hacia su colega. Para leer la carta que envió al IPD, ingrese aquí.
La atleta nacional Judith Toribio (en medio de la foto) envió al Instituto Peruano del Deporte (IDP) una carta, que en exclusiva te muestra RPP Noticias. En ella, la maratonista explica qué fue lo que pasó entre el entrenador coreano Pedro Kim y su colega Gladys Tejeda, en los pasados Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Al igual que Inés Melchor, Toribio negó que haya habido una agresión de parte del entrenador asiático hacia Gladys. Por el contrario, dijo que fue ésta la que agredió a Kim tirándole una botella de agua.
A continuación las partes más importantes de la declaración de Judith Toribio:
-Al amanecer del 12 de agosto de 2012, el profesor me indicó que vaya a la partida de la maratón de varones para ayudar a mi compañero Raúl Pacheco, ya que yo tenía credencial y podía hacerlo.
-El profesor se quedó en la entrada del comedor señalando la hora y diciendo a Raúl Pacheco que salga rápido. Luego vi a Pacheco cogiendo su desayuno y a Gladys ya sentada, mirándose ambos.
-El profesor le decía que se apure, que ya era tarde, pero Gladys seguía hablando a Raúl Pacheco y diciendo: “Todavía es muy temprano, ¿por qué tenemos que apresurarnos?”.
-Al llegar a la Aduana, yo pasé primero y luego el profesor. Raúl venía atrás porque no podía correr junto con nosotros con su comida en la mano. Junto a él estaba Gladys. El profesor ve esto y le dice: “Gladys retírese, retírese, por favor, porque tú estás entreteniendo a Pacheco sabiendo que ya es tarde”.
-Gladys no obedecía y seguía diciéndole al profesor: “Recién es temprano, ¿por qué te apresuras?”.
-El profesor le respondía: “¿Por qué me dices temprano, sabiendo que es muy tarde?”. Ella dijo: “Maestro recién es temprano. Maestro eres loco”.
-Había mucha gente, incluso los colegas coreanos del profesor estaban sorprendidos por el comportamiento de Gladys. Inmediatamente sentí que se cayó una botella de agua atrás de mí. Cuando volteé vi que el profesor estaba quejándose de un dolor en la cintura, pues Gladys le había tirado la botella. Eso pasó en un instante.
-Había mucha gente en el paradero del bus, esperando ir a la partida de la maratón, por eso no pude ubicar a Gladys. Finalmente se apareció Raúl Pacheco y subimos al bus. Llegamos tarde pasando la hora de llama de la competencia. Eso es lo que pasó el domingo 12 de agosto de 2012.
-Debo decirle Sr. Akio (Jefe de Misión en Londres 2012) que nunca el maestro Pedro Kim ha usado malas palabras al dirigirse a nosotras y menos aún a faltarnos el respeto. Él es muy estricto para que cumplamos los entrenamientos y nos cuidemos, por eso yo y los atletas del grupo de maratonistas lo respetamos mucho.
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