La tenista belga se impuso a la estadounidense y alcanzó la ronda final de dicho torneo. Ahora buscará retener la corona ante Vera Zvonareva.
Kim Clijster podrá defender su corona del Abierto de Estados Unidos ante Vera Zvonareva tras eliminar en unas durísima semifinal a la norteamericana Venus Williams por 4-6, 7-6(2) y 6-4, en 2 horas y 23 minutos.
Clijster sumó así su vigésima victoria consecutiva en el torneo, donde ha jugado la final en sus tres últimas apariciones, ganando en 2005 y 2009.
La tenista belga ya había ganado sus últimos cuatro partidos ante Venus, el último de ellos con facilidad en la final del Masters de Miami por 6-2 y 6-1, pero en este tuvo que sobreponerse a la pérdida del primer set, en un duelo muy igualado.
El primer set fue, como se esperaba, muy equilibrado. Las dos tenistas se mostraban muy sólidas con su servicio y sólo hubo un punto de rotura en toda la primera manga, que aprovechó Venus Williams en el séptimo juego para llevarse el parcial tras 35 minutos de juego.
La belga cedía su primer set en el torneo y se enfrentaba a la misión de tener que remontar ante la norteamericana, algo que sólo había conseguido anteriormente en dos ocasiones en sus enfrentamientos previos, para alcanzar de nuevo la final.
Si en el primer set el juego había sido muy homogéneo y se había decidido por los pequeños detalles, el segundo fue todo lo contrario, con continuas alternativas y ambas tenistas jugando de forma muy irregular, si bien fue la belga, la que llevó siempre la iniciativa en el marcador.
Así, dispuso primero de un 3-0 y luego de un 5-2, pero Venus Williams, jaleada por los más de 20.000 aficionados de la Arthur Ashe forzó la muerte súbita. Sin embargo, la norteamericana jugó un desempate horrible, con dos doble faltas seguidas y fallando un fácil "smash" que permitió a Clijster cobrar una cómoda ventaja de 6-1 para apuntarse la segunda manga y alargar el partido.
En el set definitivo de nuevo la segunda cabeza de serie cobró ventaja por 4-2, pero de nuevo la norteamericana se recompuso logrando igualar, aunque un nuevo "break" de la belga en el noveno juego resultó ya definitivo para la suerte del partido.
En la final, Clijster se medirá a Vera Zvonareva con la que se ha medido con anterioridad en siete ocasiones, con un balance de cinco triunfos, si bien las dos únicas victorias llegaron en los dos últimos duelos entre ambas este año, en los cuartos de final de Wimbledon y Montreal.
EFE
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